El 17 de julio de 1928, el general ílvaro Obregón, presidente electo de México, fue muerto por León Toral, fanático que pertenecía al grupo Liga Nacional para la Defensa Religiosa que estaba resentido por la guerra cristera. El crimen se perpetró en un famoso restaurante de la ciudad de México llamado La Bombilla, y aquí vemos el presidium. Obregón se encuentra platicando unos minutos antes de los disparos con el nuevoleonés Aarón Sáenz Garza, quien recibió el cuerpo del mandatario cuando iba cayendo abatido por el plomo mortal. Aarón Sáenz fue gobernador de Nuevo León y secretario de estado en tres ocasiones: con Obregón la primera vez que fue presidente; con Ortiz Rubio en dos oportunidades, tanto en Educación como en Comercio. Foto de Jorge Salazar Texto LEB
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