17/May/2024
Editoriales

Hong Kong

El verdadero nombre de la isla es Xiang – Gang, que significa ‘Aguas Perfumadas’, y de ahí derivó en Hiong – Kong para, finalmente, terminar siendo Hong-Kong. Hay versiones de que el nombre viene de Xeung Gang, que significa: ‘Ricas Aguas’, aunque otros dicen que es Xeng-Gabg, que significa ‘Puerto Delicioso’, ‘Puerto Perfumado’ o ‘Puerto de barras de incienso’. Lo cierto es que todos los supuestos orígenes del nombre tienen que ver con las aguas hermosas que rodean la isla, que en aquellos tiempos eran aguas muy limpias. Su historia es la misma de China.

En 1839, los mercaderes británicos del opio que habían sido expulsados del cantón de Guangzhou, China, se instalaron en Hong-Kong. Estos mafiosos pagaban a sus empleados con opio en vez de dinero, cuando en ese momento la población de la isla era de 3 mil 600 personas. La expulsión de los narcotraficantes británicos fue el pretexto de Inglaterra para iniciar las terribles Guerras del Opio, que fueron dos, y en las cuales Inglaterra se alzó con la victoria, firmándose en 1842 -muy al estilo sajón- el Tratado de Cantón. La gran nación de China, hoy por hoy la más poblada del planeta y convertida actualmente en una de las dos potencias mayores del mundo, en aquel momento hubo de abrirse forzosamente al mercado extranjero, el cual incluía la droga británica y cedía a Gran Bretaña por 135 años el extremo de Kowloon, así como la isla de Hong Kong.

Por cierto, Kowloon significa Nueve Dragones, nombre originado cuando el último emperador de la dinastía Sung, para huir de los mongoles, pasó a través de un territorio que tenía ocho picos y dijo que podían ser ocho dragones. Luego se incluyó él mismo (el emperador) en la cuenta, y así se llegó a los nueve, y desde entonces el emperador chino es considerado un dragón y un dios. Pero como no hay plazo que no se cumpla, ni fecha que no se llegue, en 1977 Hong Kong fue devuelto a China y, de ser una escasa población, pasó a ser la gran Hong Kong una de las regiones más pobladas del mundo, con una densidad de ¡26 mil 180 habitantes por kilómetro cuadrado!. Visitar Hong Kong es una experiencia única pues el movimiento comercial por medio de embarcaciones marítimas deja con la boca abierta a cualquiera que no esté acostumbrado a verlo, y su comercio es, además de espectacular, exótico.