Kellyanne Conway defendió al secretario de prensa de la Casa Blanca que dijo que la investidura de Trump había tenido una audiencia récord, aunque los datos muestran algo distinto.
La consejera de Donald Trump, Kellyanne Conway, dijo este domingo que el secretario de prensa de la Casa Blanca, Sean Spicer, dio "datos alternativos" sobre la realidad, en cuanto a la cantidad de personas que asistieron a la ceremonia de investidura del cuadragésimo quinto presidente de Estados Unidos.
Medios estadounidenses y de otras naciones señalaron que Spicer mintió el sábado al decir que la toma de posesión de Trump fue la más vista en la historia.
"Esta fue la mayor audiencia que jamás haya presenciado una toma de posesión, punto", dijo Spicer.
Sin embargo, fotografías mostraron que la toma de posesión de Obama en 2009 registró más asistentes en la zona del Capitolio, en Washington.
Donald Trump llega a reunir en su investidura poco menos de la mitad de las personas que Obama en 2009
Mucho menos público en la toma de posesión de Trump que en la de Obama
Mucho menos público en la toma de posesión de Trump que en la de Obama
El juramento del 45º presidente ha reunido a mucha menos gente que la de su antecesor en el cargo
CNN citó datos en cuanto al número de usuarios del Metro en Washington D.C., el día de la ceremonia el viernes pasado. Fueron 570 mil 557. En tanto, en la segunda investidura de Obama, en 2013, se registraron 782 mil viajes.
En Estados Unidos, apuntó la agencia AP, la empresa Nielsen estima que unos 31 millones de televidentes observaron la cobertura sobre la toma de posesión de Trump, una cifra menor a la primera investidura de Barack Obama y de Ronald Reagan.
Cuestionada sobre lo que dijo Spicer, en una entrevista con la cadena NBC, Conway dijo que Spicer había dado "datos alternativos".
Cuando el periodista Chuck Todd le insistió sobre que los "datos alternativos" de hecho son mentiras, y que era ridícula la afirmación de Spencer en cuanto a la asistencia a la investidura de Trump, ella respondió diciéndole que su trabajo como comunicador no era calificar de "ridículos" los dichos del vocero presidencial, de acuerdo con un reporte de CNN.
El presidente Trump, el sábado pasado, dijo que tenía una guerra con los medios, y que la gente que trabaja en ellos era de la más deshonesta en la Tierra.
