Se apagó la vida de Tabaré Vázquez y la historia lo pondrá en el lugar que se merece. Vida ejemplar del que fuera dos veces Presidente del Uruguay y primer Intendente (alcalde) de izquierda de Montevideo.
Tabaré Ramon Vázquez Rosas nació el 17 de Enero de 1940, en el humilde barrio obrero de “La Teja” , hijo de un obrero de ANCAP ( distribuidor de carburantes). Héctor Vázquez que fue despedido y mandado a prisión cuando Tabaré tenía 11 años, su madre Elena Rosas de descendencia gallega . Fue el cuarto de cinco hijos que desde pequeño tuvo que trabajar desde vendiendo periódicos, aprendiz de carpintero, vendedor de vinos y vendedor ambulante . Estudio en escuelas de gobierno; por problemas económicos, tuvo que suspender sus estudios hasta ingresar en 1963 a la Facultad de Medicina de la que se graduó en 1969 especializándose en Oncología y Radioterapia. Obtuvo una beca del gobierno de Francia que le permitió especializarse en el Instituto Gustave Roussy de Paris.
Fue en el fútbol cuando lo conocí ,en 1989, siendo Vicepresidente del Club Atlético Progreso del que después fuera Presidente y Campeón de la Primera División Uruguaya, renunciando una vez que obtuvo el campeonato.
También lo recuerdo al pasar a saludarlo a su consultorio, había una fila de cerca de 100 personas esperando consulta. Luego me explicaría que los miércoles consultaba gratis a personas de escasos recursos.
Autor del libro “Crónica de un mal amigo” , un libro con fines didácticos, trata de un viejo médico que recuerda y relata la experiencia con sus pacientes, con relatos verídicos. Sostiene que el 90% de los casos de cáncer se curan si se detectan a tiempo.
“Cuando alguien se entera que tiene cáncer, el futuro comienza a desvanecerse o a ser el tiempo de otros, vedado para el mismo. Viene a la consulta, pregunta, escucha, me mira buscando ese algo que le haga creer nuevamente que todo es posible y por lo general lo es, y se lo digo” parte de lo que decía Tabaré en sus intervenciones y entrevistas. El destino le tenía preparado morir precisamente de cáncer y ser atendido por sus alumnos .
Apenas en julio del año pasado sufrió la pérdida de su esposa María Auxiliadora Delgado, quien por un tiempo, fue el sostén de la casa , mientras Tabaré estudiaba. Fruto de ese matrimonio tuvieron 3 hijos, además criaron un hijo adoptivo. Ella trabajó mucho tiempo como empleada de la Caja de Profesionales Universitarios.
Definido por el pueblo como el mejor hijo de “La Teja”, además de haber sido el mejor Presidente de Uruguay; otorgó una computadora por niño, fue el creador del sistema integrado de salud, una reforma fiscal y una inserción internacional soberana.
En su última entrevista hizo referencia a los mitos que había sobre la izquierda si su partido, el Frente Amplio llegaba al poder: el primero , que los uruguayos la iban a pasar muy mal porque se iban a retirar inversiones, se iban a cerrar empresas, “ Ese mito lo derrumbamos porque disminuyó la pobreza, disminuyó la marginación, hubo políticas de inclusión y se atendió la discapacidad entre otras políticas” .
En 2006, bajo su liderazgo, Uruguay se convirtió en el primer País de la región de las Américas en prohibir fumar en lugares públicos y lugares de trabajo, esa medida trajo como consecuencia que fuera demandado a nivel internacional por la empresa Philip Morris ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas e Inversiones del Banco Mundial, sin embargo un tribunal de arbitraje defendió el derecho del Uruguayo de proteger la salud de su población de acuerdo a la OMS para el control del tabaco. Fumador durante muchos años, Tabaré Vázquez recibió múltiples honores, entre otros la World Heart Foundation, la Escuela de Salud Pública Bloomberg de la Universidad John Hopkins y la Campaña para Niños sin Tabaco, el único reconocimiento especial que se entregará este año.
Enfrentó su enfermedad con una tremenda dignidad. Sus últimas conversaciones con su hijo Alvaro, oncólogo de profesión como su padre , fueron de política y fútbol, no se rindió nunca y ese “mal amigo”, tocó a su puerta. “Me gustaría que me recordaran como un presidente serio, responsable, que hizo el máximo de sus esfuerzos por cumplir los compromisos que habíamos adquirido “. Será sepultado en el Cementerio de su barrio , “La Teja” con fondo musical de Joan Manuel Serrat de un poema de Mario Benedetti: “Defender la Alegría”.
