Internacional

2020 fue el año más cálido en Europa, especialmente en Siberia

A nivel mundial, 2020 fue el año más caluroso jamás registrado, junto a 2016. Pero todavía lo fue más en Europa, donde la temperatura media superó en 0,4 ºC el promedio de los cinco años más cálidos, todos ellos pertenecientes a la última década.

El calentamiento se manifestó especialmente durante el invierno, con +1,4 ºC que el récord anterior, y con +3,4 ºC respecto a la media de los inviernos de entre 1981-2010, según el informe “Estado del clima en Europa”, de Copernicus.

El fenómeno fue sobre todo perceptible en el noreste del continente, concretamente en las zonas árticas de Siberia, que sufrieron su año más cálido jamás registrado, con una temperatura 4,3 ºC superior al promedio de 1981-2020.

En su conjunto, el Ártico vivió su segundo año más caluroso, con +2,2 ºC por encima de la media histórica. En consecuencia, los casquetes glaciares árticos se redujeron a niveles jamás registrados.

Además, la ciudad rusa de Verkhoïansk alcanzó en junio una temperatura récord de 38 ºC y Siberia sufrió dos incendios hibernantes, también llamados zombis o remanentes. Se trata de fuegos que continúan ardiendo bajo tierra y que pueden volver a prender la superficie seca al cabo de un tiempo.

“Fue un año espectacular” en Siberia, dijo en rueda de prensa Freja Vamborg, autora principal del informe.

Niveles récord de CO2

En el resto del continente europeo, las canículas estivales fueron menos intensas y largas que en los últimos años, mientras que el otoño fue especialmente húmedo y estuvo marcado por una meteorología excepcional, como la tormenta “Alex”, que golpeó duramente determinadas regiones de Gran Bretaña y Francia.

Las concentraciones en la atmósfera de dióxido de carbono (CO2) y de metano, principales gases de efecto invernadero, aumentaron 0,6% y 0,8%, respectivamente en un año, para alcanzar los niveles más altos jamás registrados desde que empezaron a medirse por satélite estos datos, en 2003.

Los resultados del informe anual de Copernicus distan mucho de los objetivos del Acuerdo de París, que pretende reducir las emisiones para limitar el calentamiento a +2 ºC e idealmente a +1,5 ºC, respecto a la era preindustrial.

Para alcanzar esta última meta, sería necesario reducir las emisiones mundiales de CO2 de 7,6% anual, entre 2020 y 2030.

Tanto la subida de la temperatura a nivel mundial como el aumento del nivel de los océanos de los últimos 10-15 años “muestran una aceleración” del cambio climático, dijo a la AFP Jean-Noël Thepaut, director de Copernicus.

Y aunque otros indicadores son menos contundentes “todas las tendencias van en la dirección equivocada”, añadió Thepaut, subrayando la “urgencia” de actuar contra el calentamiento.