04/Jul/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

Julio 1 de 1974: Dominar la naturaleza ha sido el sueño de la humanidad, y en buena medida son los ingenieros su avanzada para conseguirlo. Ciertamente no se ha logrado del todo, pues aún suceden eventos como el ciclón Otis que en octubre pasado destruyó buena parte del puerto de Acapulco, y hace unos días la tormenta tropical Alberto dañó la infraestructura vial de Monterrey, y filtró agua en la cortina de la Presa Libertad que está en etapa de construcción, impidiendo que el acueducto Linares – Monterrey abastezca agua potable a la ciudad. Nuestros ingenieros tienen la capacidad de reparar los daños provocados por estos fenómenos meteorológicos, incluso para construir obras ‘blindadas’ contra posibles embates imponderables naturales, pero falta una adecuada planeación de recursos económicos para hacerlo. 

 La Ingeniería mexicana y sus caudales técnicos pueden, no sólo reparar daños, sino aprovechar la fuerza de la naturaleza, y transformarla en beneficiosa. 

 Con ese afán ha ingeniado pertrechos, presas rompe picos, plantas hidroeléctricas, y otras obras que transforman en beneficios las fuerzas naturales. 

 Desde luego, esto además de los tradicionales caminos, puentes, edificaciones y obras diversas que proporcionan seguridad y confort a las personas. 

 México ha tenido y tiene actualmente grandes ingenieros que, por cierto, hoy celebran el Día Nacional del Ingeniero, que desde 1973 planteara el ingeniero Eugenio Méndez Docurro, secretario de comunicaciones y transportes, para honrar a los ingenieros, hombres y mujeres, de todas las especialidades. 

 En el Renacimiento les llamaban ingenieros a quienes diseñaban y fabricaban armas y artefactos militares. Los que se dedicaban a la construcción eran llamados alarifes, peritos, constructores o arquitectos, hasta que en el siglo XVIII se denominó “Ingeniero Civil” al constructor que no fuese ingeniero militar. Actualmente, a partir del Cambio Climático se debe considerar al ingeniero como un profesional indispensable para que los desarrollos urbanos, rurales e industriales sean realmente sostenibles, pues las súper congestionadas calles citadinas, la contaminación ambiental, la escasez y exceso de agua y la falta de energía eléctrica, están ya en un punto crítico. Porque la naturaleza está reaccionando a los daños que la humanidad le ha causado, y hay tantos ejemplos de esto que sería ocioso tratar de resumirlo.

 Baste con entender que estos ya no son tiempos de buscar solamente la máxima rentabilidad económica de cualquier proyecto, se deben considerar otros aspectos que son vitales. En los nuevos desarrollos de toda índole se debe escuchar la opinión de los ingenieros, desde la concepción de la Ingeniería Primaria, además deben participar en el proceso constructivo y brindar asesoría durante toda la vida útil del desarrollo en cuestión para darle un buen mantenimiento, e identificar los cambios que deban hacerse para que siga siendo realmente útil. 

 Da pena y coraje ver grandes proyectos sin considerar el expertís de los ingenieros. Es inimaginable un mundo moderno sin ingenieros de las diversas especialidades. Casi todo lo que se ve hecho por el hombre, tiene la participación de los Ingenieros.

 

     ¡Feliz Día a todos los ingenieros mexicanos!