18/Apr/2024
Editoriales

El Premio Nobel arma de guerra e ideologización

Sin duda el Premio Nobel ha sido otorgado a muchos personajes cuya obra o actividades han aportado mucho a la humanidad. Entre ellos a grandes figuras históricas como María Curie, Albert Einstein, Martín Luther King, Nelson Mandela y otros muchos que podríamos enumerar. Sin embargo, en las últimas décadas, este premio se ha convertido también en un arma de guerra, de guerra irregular o cultural, y de ideologización, para las potencias occidentales con mucha influencia en la Academia Sueca que los otorga. Sobre todo, en el caso del Premio Nobel de la Paz que ha sido entregado a figuras como Henry Kissinger o Barack Obama, justo en los años en que estos personajes organizaban o golpes de estado (Chile, Argentina etc.) o guerras e invasiones en diferentes naciones (Libia, Afganistán, Irak, etc.  Podríamos decir también que dentro de las otras vertientes del premio como la economía también se ha usado para premiar a los economistas que, legitiman o defienden el orden económico post-1970s, como M. Freidman,  Gary Backer etc. y el gurú de todos ellos F. Von Hayek ; y también a algunos de los “disidentes” de ese mismo sistema, al que consideran que pueden criticar, pero nunca cambiar como J.  Stiglitz  P. Krugman . En esta última asignación de los Premios Nobel, este año 2022, esta característica de otorgar  el premio a figuras proclives o favorables al sistema neo liberal y a los poderes de este como la OTAN o el sistema financiero,  se repitió. Se otórgale Premio Nobel de Economía a tres personajes dentro de los cuales destaca, Ben Bernanke, quien fungiera como presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos de 2006 al 2014, los años en que se llevó a cabo el rescate del sistema bancario en quiebra como resultado de la “crisis de las empresas punto.com” y el índice Nasdak en la Bolsa de Valores de Nueva York a partir del 2001, y se inició el rescate masivo de empresas y bancos por la vía de las inyecciones de dinero público, el llamado “alivio cuantitativo” (qualitative easing). Bernanke fue designado por George W. Bush y reconfirmado por Barack Obama para seguir con la misma tarea, inyectando dinero al sistema financiero especulativo y construyendo la llamada “burbuja de todo”, con recursos ilimitados para la especulación financiera la mismo que hoy ha desembocado en la alta inflación que azota a Estados Unidos y a Europa y desde ahí al mundo. Al otorgarle el Premio Nobel a Ben Bernanke, la Academia Sueca valida sus crímenes financieros y el desastre que provocó. 

 Algo parecido se puede decir del premio Nobel de la Paz. Esta fue vez otorgado a organizaciones abiertamente anti rusas convirtiéndose en un arma política de occidente (OTAN) que está decidido a aplastar y desmembrar a Rusia usando como instrumento a Ucrania y su gobierno. El Premio Nobel de la Paz se otorgó esta vez a: Alex Bialatsky de Bielorusia un activista anti ruso en ese país. Igualmente, a Memorial la organización rusa anti Putin y favorable a occidente. Finalmente, a Libertades Civiles; una organización que pretende ser resistencia anti rusa dentro de Ucrania de forma civil y suma esfuerzos son su gobierno con ese fin. Ucrania, el país que vivió un golpe de estado abiertamente fascista en 2014, y que, desde entonces se dedicó a combatir y eliminar a la población de habla rusa y pro rusa dentro de su territorio provocando las acciones militares del Kremlin, y que nos presentan en occidente como víctima y audaz “defensora de la democracia occidental” anti el “despotismo ruso”.  Habría que preguntarles a los 19 partidos de oposición que han sido prohibidos y perseguidos en Ucrania, qué piensan de los beneficiarios del Premio Nobel de la Paz de este 2022 y de la supuesta “defensa de la democracia y la libertad” del gobierno pro fascista de V. Zelensky, el principal beneficiario político del Premio Nobel de la Paz de este 2022.