WASHINGTON - El fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, se puso al margen el jueves de cualquier investigación sobre la presunta interferencia de Rusia en las elecciones presidenciales de 2016, debido a que estuvo involucrado en la campaña de Donald Trump.
Sin embargo, Sessions, quien durante mucho tiempo fue senador, dijo que no hizo nada malo cuando no reveló que se había reunido el año pasado con el embajador ruso durante su testimonio en el Senado para ratificar su nombramiento.
El funcionario argumentó que las reuniones fueron en su calidad de senador y no como parte de su rol en la campaña.
"Me he recusado en los asuntos que tengan que ver con la campaña de Trump", dijo a periodistas Sessions en una improvisada rueda de prensa, que siguió a llamados de varios de sus compañeros republicanos para que tomara esa medida y pedidos de legisladores demócratas para que renuncie.
Sessions dijo que había estado considerando la recusación -que lo descarta de cualquier papel en una investigación- incluso antes de la controversia sobre los lazos de Rusia con el entorno del presidente Trump, que han marcado los primeros días del mandato del magnate inmobiliario y ex estrella de la televisión.
La controversia resurge en momento en que Trump y los republicanos, que controlan el Congreso, tratan de dejar atrás los tropiezos del inicio del mandato para enfocarse en cambios políticos importantes en asuntos como inmigración y salud.
Y en un hecho que agudiza la polémica, el diario USA Today reportó el jueves que al menos otros dos miembros de la campaña de Trump dijeron haber hablado con el embajador Kislyan en una conferencia en los márgenes de la Convención Nacional Republicana en julio pasado.
J.D. Gordon, quien fue director de seguridad nacional de la campaña de Trump, y Carter Page, otro miembro del comité asesor del equipo para los comicios presidenciales, admitieron haberse reunido con el embajador ruso, agregó el diario.
Trump ya había despedido al asesor de seguridad nacional Michael Flynn el mes pasado por revelaciones de que discutió las sanciones de Estados Unidos a Rusia con el embajador de Moscú, Sergei Kislyak, antes de que el mandatario asumiera.
Durante su testimonio bajo juramento en su audiencia de confirmación en el Senado de enero, Sessions respondió a una pregunta del senador demócrata Al Franken que no "tuvo comunicaciones con los rusos" durante la campaña presidencial.
Pero el miércoles en la noche, el diario Washington Post reveló que Sessions, uno de los principales asesores de campaña de Trump, recibió a Kislyak en su despacho en el Senado en septiembre.
La otra cita fue en julio, en un acto de la Heritage Foundation al que asistieron unos 50 embajadores, durante la Convención Nacional Republicana, indicó el diario.
Sessions dijo que fue "honesto y correcto" cuando respondió a Franken, porque había una diferencia entre su rol como senador y el de asesor de campaña.
Políticos demócratas pidieron su renuncia por considerar que mintió bajo juramento en la audiencia en el Senado.
(Reporte de Doina Chiacu, Steve Holland