Noviembre 05 de 1962: Teléfonos de México, empresa paraestatal monopólica del servicio telefónico, pone en servicio en Monterrey, junto al novedoso sistema de microondas, un moderno equipo de impulsión directa para el servicio de llamadas de larga distancia. Con este equipo, la operadora se comunica directamente al número solicitado ahorrando tiempo al usuario, pues ya no se requiere que conteste la operadora foránea. Esto abrió la puerta para que se instalaran en la ciudad casetas de larga distancia, facilitando la comunicación con personas y familiares foráneos.