León Trotsky (Ucrania, 1879- 1940) ruso de origen judío fue uno de los grandes teóricos del siglo XX. Junto con Lenin fue dirigente de la revolución proletaria más importante del mundo. Alcanzó a ser presidente del soviet de Petrogrado en 1905 pues creó el Ejército Rojo con puros obreros revolucionarios que venció a 14 ejércitos extranjeros y al ejército blanco en la guerra civil.

Pero al morir Lenin en 1924, inicia una lucha dura al interior del núcleo bolchevique entre Stalin –que era el secretario general del comité central del partido comunista- y el intelectual y periodista Trotsky. Sus diferencias teóricas, políticas y éticas fueron creciendo, por lo que cuando Stalin toma el poder dictatorial, Trotsky prefiere exiliarse y se viene al paraíso llamado México. Llegó a vivir en la Casa Azul de Diego Rivera hasta 1939 cuando rompe con el muralista mexicano que era su anfitrión, debido a su breve pero intensa relación amorosa con Frida Kahlo, quien cayó a sus pies fascinada con su inteligencia y la admiración que sentía por este talento ruso.

Se cambia a una casa del mismo barrio de Coyoacán, hasta donde un supuesto Jackes Monard, que se llamaba realmente Ramón Mercader, se le infiltró ayudado por una secretaria a quien sedujo, diciéndose admirador de Trotsky y pidiendo ser su discípulo. Trotsky lo entrevistó en su casa y una vez a solas en su despacho, por la espalda el asesino le clavó una pica en la cabeza, muriendo un día después. Al funeral asistieron 300 mil personas, cifra enorme considerando que en esa década la ciudad tenía menos de dos millones de habitantes. El criminal recibió 20 años de prisión mientras que en Rusia hubo una fiesta enorme entre los millones de seguidores de Stalin.