Aunque poco difundida en México, la obra de Rosario Sansores es conocida en toda Latinoamérica a tal grado que su poema “Cuando tú te hayas ido”  es un himno en el Ecuador, musicalizado por Carlos Brito y titulado “sombras” emblemático “pasillo”, género musical colombiano y  ecuatoriano, cantado en todas las regiones de esos países.

 Rosario Sansores nació en Mérida, Yucatán, el 25 de agosto de 1889 y desde muy joven, comenzó a escribir poesía a pesar del impedimento de sus padres, el acaudalado Juan Ignacio Sansores y Laura Pren Cámara. A los 14 años se casó con el cubano Antonio Sangenis mudándose a La Habana, antes de un breve paso por Nueva York, donde vivió un tiempo.

 En la isla, vivió  23 años, escribió en periódicos y revistas como Bohemia, el Fígaro, El Diario de la Marina, donde aún se recuerdan sus poemas y escritos firmados bajo los seudónimos de “Crysantheme”, “Rosalinda Seymur” entre otros. La mayoría de sus poemarios los escribió después de 1918, cuando muere su esposo.

 Su epistolario sentimental de esta bella mujer, se encuentra distribuida en 122 poemas y más de 145 títulos en prosa donde sobresale el amor y desamor, encuentros y desencuentros, ella misma se definía como una romántica y cursi. Nunca dejó de serlo. En 1911 publicó “Ensueños y quimeras” y “Del país del ensueño”. En 1921 publica en La Habana “Las horas pasan”. Ya en México, donde vive con sus dos hijas publica “Mientras se va la vida”, en Madrid le publican en 1927 “Cantaba el mar azul” también publica en México en 1933 “La novia del sol”. Se dice que todos los versos contenidos en esos poemarios los escribió en Cuba.

 En La Habana, conoce a Porfirio Barba Jacob, de quien se llega enamorar, y pasados los años ya viviendo en México, se reencuentran y Rosario lo atendió en su enfermedad última, que lo llevó a la muerte.

 En Ecuador ha sido objeto de múltiples homenajes, 28  poemas han sido musicalizados, sobresalen, aparte de “Sombras”, “No importa” y “ Me vestí de negro”. También en Sudamérica se le conoce como la mexicana creadora del himno ecuatoriano. En octubre de 1967, fue invitada a Ecuador, donde recibió la Lira de Oro por el Presidente Arosemena.

 Regresa a México y trabaja para el periódico “Novedades” durante muchos años, son famosas sus crónicas de sociales y sus artículos sobre tópicos de actualidad. Fallece el 7 de enero de 1972. Hace 50 años.

Me voy como vine

Con mi paso leve

Con mi fresca risa

Con mi voz alegre.