Espectáculos

Madonna, acusada de presentarse ebria en un concierto

Madonna se defendió el martes de las acusaciones de que se encontraba ebria sobre el escenario la semana pasada durante una actuación en Australia, diciendo que sólo era un papel en el que se vestí­a como un payaso y se caí­a de un triciclo.

En una publicación en la red social Instagram, la cantante pop de 57 años agradeció el apoyo a sus admiradores, después de que varios ví­deos publicados por el espectadores mostraron un comportamiento errático en los conciertos del 10 y 12 de marzo en Melbourne.

Las crí­ticas se conocen cuando disputa con su ex marido, el cineasta británico Guy Ritchie, la custodia de su hijo de 15 años Rocco.

"Es muy triste que la gente no conozca el arte de interpretar un papel. No podrí­a hacer ninguna de mis actuaciones colocada o borracha", escribió Madonna en Instagram.

"Esto demuestra sexismo y misoginia; no sólo no cobramos igual que los hombres sino que todaví­a se nos trata como herejes si nos comportamos mal o si nos salimos de lo establecido", añadió.

Madonna se vistió la semana pasada con una peluca rosa, un sombrero de copa, medias a rayas y un traje amarillo para una actuación especial de "Lágrimas de un Payaso", como parte de su gira "Corazón Rebelde". Después, la cantante publicó una foto mientras bebí­a un cóctel Cosmo encima del escenario, según sus representantes.

Ví­deos publicados por seguidores mostraron a la cantante tropezándose y hablando de forma errática durante el concierto, que contrastó con sus presentaciones muy coreografiadas. Dos dí­as después, su comportamiento volvió a crear revuelo en otro concierto en Melbourne.

En la actuación de "Lágrimas de un Payaso", Madonna mostró una gran foto de Rocco cuando era pequeño para transmitir a sus fans que "probablemente habrí­a disfrutado más de esta gira ('Corazón Rebelde') si él no hubiera desaparecido tan de repente".

Rocco lleva viviendo con su padre en Londres desde diciembre, después de que se negó a volver a casa de su madre en Nueva York. El joven habí­a trabajado tras bambalinas en los primeros conciertos de la gira de Madonna.