El sindicato estadounidense United Auto Workers (UAW) amplió este viernes la huelga en el sector del automóvil al anunciar que decenas de centros de trabajo de General Motors (GM) y Stellantis empezarán paros a partir de las 12.00 horas (16.00 GMT).
El presidente del sindicato, Shawn Fain, dijo que mientras que las negociaciones con Ford están avanzando, GM y Stellantis “todavía necesitan un gran empujón” y acusó a estas dos empresas de rechazar todas las propuestas presentadas por el sindicato.
Fain apuntó que todos los centros de distribución de GM y Stellantis en Estados Unidos se unirán a la huelga que se inició hace una semana con el parón en tres plantas de montaje de los tres grandes fabricantes de automóviles estadounidenses.
En total, 38 centros de distribución de repuestos de GM y Stellantis, repartidos por 20 estados del país y que emplean a miles de personas, iniciarán huelgas indefinidas.
El líder sindical justificó ampliar la huelga a sólo GM y Stellantis al señalar que aunque la negociación con Ford no ha terminado, UAW quiere reconocer “que al menos Ford se está tomando en serio llegar a un acuerdo”.
Fain explicó que GM y Stellantis han rechazado todas las propuestas presentadas por el sindicato, y aceptadas por Ford, en temas de seguridad laboral, distribución de beneficios entre empleados y conversión de trabajadores temporales a permanentes.
“Cerraremos los centros de distribución de GM y Stellantis hasta que esas dos compañías recuperen el sentido y acudan a la mesa con una oferta seria”, declaró un combativo Fain, que animó a todos los que apoyan el sindicato, “incluido el presidente de Estados Unidos”, Joe Biden, a que se unan a los piquetes que bloquean los centros en huelga.
La huelga de los centros de distribución de repuestos, según dijo, afectará las operaciones de reparación de vehículos de las dos compañías.