Noviembre 2: El Día de los muertos. En México es una de las fiestas populares más importantes del año. Cierto es que llegó de España, pero su origen es judeo-cristiano, proveniente del segundo libro de los Macabeos en el versículo 46 del capítulo 12: “mandó ofrecer ese sacrificio de expiación por los muertos para que quedaran libres de sus pecados”. Luego de la violenta conquista de Tenochtitlan inició una etapa de adaptación pacífica, y los europeos descubrieron que los mesoamericanos dedicaban un día de su mes de veinte días a los muertos, con una festividad mayor cada 260 días.

Entendieron que la muerte es un elemento que linda entre lo festivo y lo trágico, por lo que en vez de reprimirlo, lo fomentaron, pues era un punto de coincidencia entrambas culturas. El rito ha evolucionado en la forma pero el fondo es el mismo. Este día se dedica a los difuntos visitando sus tumbas y, según la región, se arma un altar de muertos, o una serenata en los camposantos. El altar de muertos tiene siete escalones, -el paso del alma a su descanso eterno-.

En el primero se coloca la fotografía o pintura del santo o virgen de la devoción. El segundo se dedica a las ánimas en el purgatorio; en el tercero se pone sal para los niños del purgatorio; en el cuarto, “pan de muerto”; en el quinto, comida y fruta que le gustaba al difunto. En el sexto, la fotografía del muerto y en el último se pone una cruz con un rosario hecho de tejocote y limas. Se prenden cuatro velas principales, formando una cruz. Al lado del altar, una olla de barro sobre un anafre con hierbas aromáticas: albahaca, laurel, romero, manzanilla y otras. Se adorna con papel morado y amarillo que significan la unión entre vida y muerte. Además, papel picado que da alegría y colorido a la vida; flores que son la bienvenida al alma; la flor blanca representa el cielo; la amarilla, la tierra; y la morada, el luto. Mas velas, cuyas llamas representan la ascensión del espíritu. El lienzo blanco, representa la pureza y el cielo; el cirio, el alma sola y el incienso de copal, representa el paso de la vida a la muerte. En Monterrey, las tres grandes fiestas populares de carácter religioso son: el Día de Muertos -hoy-, El Día de la Virgen de Guadalupe -12 de diciembre-, y la Navidad -25 de diciembre; es decir, estamos empezando la temporada de celebraciones religiosas festivas.