06/May/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

Febrero 19 de 1856: Declara el gobernador Santiago Vidaurri, sin la aprobación del Congreso Federal, la anexión de Coahuila a Nuevo León. Tras las tragedias de la guerra con Estados Unidos y la venta de La Mesilla, la reacción de Juan Álvarez y otros caudillos liberales fue lanzar en 1854 el Plan de Ayutla. En ese escenario revolucionario emerge la figura de Santiago Vidaurri como el líder regional más importante del noreste mexicano. Promulgó el Plan Restaurador de la Libertad, convocando a los estados de Nuevo León, Coahuila y Tamaulipas a formar una entidad separada en tanto la situación mejorara. Y en Coahuila sí prendió entre los altos militares la idea de buscar protección en un liderazgo como el de Vidaurri, así que ya conseguido el tutelaje político, a pesar de la oposición de varios liberales coahuilenses, sumó de facto a Coahuila para formar el Estado de Nuevo León y Coahuila con capital en Monterrey. Desde luego que esto desagradó al presidente Comonfort, quien mandó reprimir a Vidaurri. Pero no fue sencillo someter al lampacense así que mejor se dieron los Acuerdos de la Cuesta de los Muertos, el 18 de noviembre de 1856. Así se inició un proceso que terminó legitimando en el artículo 43 de la Constitución de 1857 al Estado de Nuevo León y Coahuila. Santiago Vidaurri consiguió lo que ningún otro gobernante neolonés ha podido: crecer el territorio del Estado en forma geométrica. Este estatus legal terminó el 26 de febrero de 1864 cuando volvieron a separarse los dos estados del noreste mexicano.