Junio 17 de 1994: Luego de haber conseguido la firma de un tratado preliminar de Cese al Fuego en San Cristóbal de las Casas, Manuel Camacho Solís renuncia a su cargo de coordinador para el Diálogo y Reconciliación en Chiapas. Camacho Solís fue un político inteligente, con capacidades profesionales, dialécticas e intelectuales, que intentó ser el candidato del PRI a la presidencia de la República. Sin embargo, cuando el elegido por el PRI fue Luis Donaldo Colosio Murrieta, Camacho externó públicamente su molestia con el presidente Carlos Salinas de Gortari, y renunció a la Regencia del Departamento del  Distrito Federal, recibiendo como respuesta inmediata de CSG el nombramiento de secretario de Relaciones Exteriores. Pero ante la complicación política creciente con el alzamiento armado del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) que había explotado iniciando ese año en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, Salinas nombró a Camacho coordinador de las negociaciones de paz, debido a que MCS tenía relaciones con todos los grupos políticos habidos y por haber dentro y fuera del PRI. Por lo que, a la muerte de Colosio, no faltó quien quisiera vincular a Camacho con el criminal atentado que sufrió en Tijuana el sonorense, puesto que su disgusto (de MCS) había nacido con la postulación de Colosio, pero todo resultó que eran chismes sin pruebas. El magnicidio del candidato presidencial priísta fue resuelto a medias, atrapándose en el acto criminal al asesino material, pero no al o los intelectuales, algo que suele suceder en este tipo de atentados en todo el mundo. Manuel Camacho alcanzó a ser candidato a la Presidencia de México por el Partido de Centro Democrático en las elecciones de 2000 que ganó Vicente Fox. Murió siendo senador de la República en el año de 2015, y recientemente su hijo Juan Camacho Velasco tuvo problemas con unos indígenas chiapanecos, precisamente en San Cristóbal de las Casas. Por su parte, el hijo de Luis Donaldo Colosio, del mismo nombre, gobierna exitosamente la Ciudad de Monterrey.