Noviembre 30 de 1867: muere ejecutado en la Hacienda de Nopalillos, Galeana, Nuevo León, el coronel Platón Sánchez. Nació el 15 de octubre de 1831 en la Hacienda del Capadero, en Tempoal, Veracruz, y fue un destacado militar. La muerte de sus padres Anastacio Sánchez y Josefa Meraz dejó al niño Platón hasta los veintidós años de edad, a cargo de su tía Josefa Meraz, en Huejutla, Hidalgo. A los 22 años se inscribió en el Colegio Militar, y su situación escolar fue irregular, pues la edad máxima permitida para ingresar a esa institución es de veinte años, y es probable que se haya quitado un par de años para inscribirse en el prestigioso Colegio Militar. Terminó sus estudios en cuatro años con el grado de subteniente de artillería entrando al Ejército nacional, en tiempos del presidente Benito Juárez. Durante la invasión francesa fue enviado a defender la ciudad de Puebla al mando del general Ignacio Zaragoza, participando en la batalla del 5 de mayo de 1862, así como en el sitio de 1863, evento en el que resultó herido de bala. A pesar de ello continuó peleando por lo que fue objeto de una mención honorífica y ascenso a Capitán primero. Fue preso de los franceses pero logró escapar y se presentó en la Capital de México para reinscribirse en el ejército. El capitán Platón Sánchez acompañó al presidente Juárez durante su periplo en el norte de México. Luchó contra los franceses en Monterrey, Saltillo y Matamoros, pero en 1865 fue preso de nuevo y de nuevo se fugó. En mayo de 1867 formó parte del ejército que sitió Querétaro y por su desempeño lo ascendieron a Teniente Coronel del Ejército Nacional. Su lealtad y capacidad le valieron para ser nombrado presidente del Consejo de Guerra que juzgó al monarca destronado Maximiliano de Habsburgo y a Miguel Miramón y Tomás Mejía. El 14 de junio de 1867 fue quien leyó la sentencia de muerte a los tres distinguidos reos. Continuó dando servicio a la República como militar reconocido y estando al mando del Cuerpo de Cazadores, en la Hacienda de Nopalillos, jurisdicción de Galeana, Nuevo León, varios elementos que habían pertenecido al Regimiento de la Emperatriz Carlota se sublevaron en contra del gobierno republicano de Juárez y lo sorprendieron, ejecutándolo. Al saber de su muerte, el gobierno le rindió honores y se erigieron varias poblaciones con su nombre en el país, comenzando con la Hacienda donde nació que ahora se llama Platón Sánchez. En nuestra ciudad tenemos una calle del centro que lleva ese nombre, así como una escuela primaria.