Cuando el cuerpo registra una temperatura superior a los 40 grados se presentan problemas, como la insolación o el deceso. Conoce los diversos síntomas del golpe de calor.
Con la llegada del verano y las altas temperaturas, el golpe de calor se vuelve una dificultad frecuente entre la población.
Aunque muchas personas no se sienten susceptibles a padecer este trastorno, la exposición prolongada a los rayos del sol resulta inevitable en esta temporada del año.
¿Qué es un golpe de calor?
Es la incapacidad de regular la temperatura corporal; ignorar los síntomas puede ocasionar daños graves o, incluso, la muerte.
Síntomas de un golpe de calor:
- Debilidad
- Dolor de cabeza
- Mareo, nauseas y/o vómito
- Aceleración del ritmo cardíaco
- Piel caliente y roja
- Confusión o perdida del conocimiento
- Contracción involuntaria de los músculos
- En los niños y adultos mayores, se puede presentar sin estar expuestos al sol, haciéndolos más vulnerables.
- En los jóvenes, se muestra al realizar actividades físicas sin la debida hidratación y bajo condiciones climatológicas adversas.
¿Cómo prevenir un golpe de calor?
- Beber agua natural y/o con electrolitos de forma regular.
- Evitar la exposición prolongada al sol, en especial de las 10:00 a las 16:00 horas.
- Usar ropa ligera de algodón y de colores claros.
- Usar gorra, lentes y protector solar (aplicar 30 minutos antes de la exposición al sol y cada 2 horas después de la exposición).
- Permanecer en lugares ventilados y con temperatura ambiental entre 18 y 26 grados centígrados.
¿Qué hacer ante un golpe de calor?
- Ubicarse en un lugar fresco, ventilado y a la sombra.
- Aplicar paños húmedos en el cuerpo, especialmente en la frente, nuca y axilas.
- Mantener las piernas elevadas con alguna almohada u otro objeto.
- Retirar ropa o accesorios innecesarios.
- Acudir a la unidad de salud más cercana.
Fuente: Medicina Interna del Hospital Universitario “Dr. José Eleuterio González”