Nuevamente realizado en formato presencial, el concurso de altares de muertos reconoció tanto la disposición de las ofrendas como el trabajo en equipo de los estudiantes de la UANL.

En su regreso al formato presencial, el Certamen de altares de muertos UANL 2022 fue todo un éxito, ya que 35 escuelas y facultades respondieron a la convocatoria ofreciendo una calidad indiscutible en sus montajes.

 Dicho certamen concluyó su edición anual con la designación de los primeros lugares en las instalaciones de la Casa Universitaria del Libro.

En esta ocasión el jurado estuvo integrado por Luisa Fernanda Patrón, Vanessa Carmona y Antonio Guerreros, quienes estuvieron acompañados en el anuncio de los ganadores por la titular de la Dirección de Desarrollo Cultural de la UANL, Lizbet García Rodríguez, y el director de la Casa del Libro, Antonio Ramos Revillas.

A celebrar la vida

Lizbet García Rodríguez destacó la relevancia del regreso a la presencialidad del tradicional certamen de altares de muertos de la Máxima Casa de Estudios del Estado ya que fue el único evento que no pudo realizarse durante la pandemia causada por el Covid-19.

 “La vida es la protagonista en esta tradición. Nuestros altares están dedicados a la vida, a personas fallecidas por Covid-19, a mujeres violentadas, artistas, profesores. Por esto es importante que participen y no dejen morir una de las tradiciones que mejor representan a nuestra cultura”, dijo Lizbet García Rodríguez, Titular de la Dirección de Desarrollo Cultural.

 En su oportunidad, Ramos Revillas hizo hincapié en la importancia que cobran los objetos al integrarse a los altares de muertos.

“Los objetos que se ponen en cada uno de los altares tienen una relación directa con las fases del duelo y del dolor. Imagino este proceso de los familiares tratando de reunir las cosas más especiales de sus seres queridos.

 “Es un momento maravilloso en el que todos nos damos un tiempo para pensar en los que se han ido. Y los objetos nos ayudan a reorganizar sus recuerdos, sus historias”, indicó el director de la Casa Universitaria del Libro.

Un trabajo en equipo

El jurado del concurso refirió la pertinencia de continuar las tradiciones entre los universitarios, puesto que, además de reforzar el folclor, se incentiva el trabajo en equipo y se favorecen sus habilidades creativas.

 “Es una alegría ver cómo los maestros involucran a los alumnos en las tradiciones. Además de que con cada altar que se crea no se olvida a un ser querido. Se le recuerda y se mantiene viva su memoria”, dijo Vanessa Carmona, Miembro de jurado.

 Para la promotora cultural y fundadora del Grupo El Tigre Luisa Fernanda Patrón y el historiador y cronista Antonio Guerrero Aguilar, la deliberación del jurado de los primeros lugares obedeció, entre otros motivos, al número y la distribución de objetos, así como a la calidad de su representación.

Primer lugar (empate) de 6,500 pesos

Escuela Industrial y Preparatoria Técnica “Álvaro Obregón”, Unidades Churubusco y Guadalupe

 altares dedicados a Pedro Armendáriz y a una exalumna.

Segundo lugar de 5,500 pesos

Preparatoria 25, Unidad Salinas Victoria

altar dedicado al emperador Moctezuma

Tercer lugar de 4,500 pesos

Facultad de Artes Visuales

altar dedicado a la pintora Remedios Varo