Según lo ha dicho el propio representante de Morena ante el INE, Horacio Duarte, el propósito de la multa de ese organismo a Morena por 197 mdp es el de “manchar la imagen de Morena y de AMLO”. Sin detenernos a discutir el asunto en sí mismo, es evidente que ese es el resultado neto y único del escándalo o “Morena gate”: El que la imagen del tabasqueño se vea afectada.
Paralelamente, el sector privado y organismos como el Consejo Coordinador Empresarial (CEE) y su CEESP; la Coparmex y conocidos “analistas” como Jesús Silva Herzog, José Antonio Crespo o Jorge Fernández Menéndez, se han dedicado a atacar tal o cual aspecto de los anuncios y propuestas de AMLO y de su personalidad, en los últimos días y especialmente la futura designación de “delegados federales” en los estados o la descentralización de las Secretarías de Estado a diferentes puntos de la República.
Margarita Zavala escribió este lunes en El Universal un artículo centrado en el tema de: “Austeridad no es sinónimo de eficiencia”, refiriéndose a la propuesta de AMLO de bajar salarios a los altos funcionarios del gobierno. Cuando Margarita Zavala renunció a su candidatura algunos analistas especularon que en el futuro podría ser “la nueva líder de la oposición” o “la nueva líder de la derecha mexicana”. Con el PRI hecho añicos y el PAN disminuido y dividido es muy posible que sí. La nueva oposición, al estilo de la de Venezuela o, peor aún, la de Ucrania, irá emergiendo entre estos grupos empresariales, de políticos y de analistas.