11/May/2024
Editoriales

El cuchillo, su edad y desarrollo

Cuando llegaron los europeos a América -a finales del XV y principios del siglo XVI- los aborígenes no conocían los metales como elemento armamentista, y mucho menos las armas de fuego. Los cuchillos, las espadas y los caballos hicieron que los hombres barbados fueran vistos como semi dioses.  

La historia del hombre es la historia de sus guerras; y para guerrear se han concebido los instrumentos más rebuscados; las mentes más brillantes de la historia algo han tenido que ver con el desarrollo de las armas sofisticadas y prosopopéyicas.

Las primeras armas fueron el hacha y el cuchillo que en el paleolítico se fabricaban hace unos 7 mil años de antigüedad en Egipto con hojas de pedernal. Y al llegar los metales,  después de la llamada edad de piedra, aparecieron cuchillos de cobre, pues el hierro era para espadas y artículos lujo, dado que al principio era un material escaso. La cultura suiza de Hallstatt produjo hace 2 mil 700 años cuchillos de hierro con empuñadura de bronce. En Grecia fue donde el cuchillo comenzó a verse encima de la mesa; en un vaso griego se ve a Aquiles festejando su victoria tras la muerte de Héctor con un cuchillo en la mano. Roma produjo gran variedad de cuchillos considerados joyas de arte; como uno encontrado en una tumba romana de la ciudad de Leyden, con mango de oro e incrustaciones de piedras preciosas. Se fabricaban cuchillos de bronce, de cobre para la caza, de zapatero, de herrero, para la fruta, para el queso, para el pescado, para la carne y hasta para cortarse las uñas. Las mujeres casadas dejaban de llevar oculto en su cuerpo el pequeño cuchillo típico de las solteras, porque ya tenían quién las defendiese y no se requerían armas. En la Edad Media se esperaba que los invitados a un banquete llegaran con su propio cuchillo, pues el anfitrión no podía proporcionarles a todos sus invitados uno. Claro que las clases altas sí podían y lo hacían; las mesas de los ricos eran una especie de exhibición de cuchillos de lujo. Los cuchillos se ponían con un estuche de cuero, y el usuario los sacaba para usarlos. Junto al cuchillo estaba un punzón y una lima para afilarlo. Al principio se daba un cuchillo especial para abrir ostras cuando se servía este alimento. Hasta el siglo XVIII el cuchillo fue un artículo de lujo, pues los tres artículos de lujo en una mesa: cuchillo, tenedor y cucharas aparecieron hasta finales del siglo XVI, que nace el concepto de cubertería. Ah, y el cuchillo servía -como en algunos güéstern joligudenses- también de tenedor.