Mayo 4 de 1882: se inaugura el tramo México- Querétaro del ferrocarril. Eran 73 kilómetros de vía e instalaciones para las corridas del tren de pasajeros, que modificó la vida de la región, que se convirtió en una zona integrada dándole una nueva dimensión tanto a la capital de la República como a Querétaro. La compañía Constructora Nacional Mexicana fue la concesionaria que corrió el trazo e instalación de la vía, así como el acondicionamiento ferroviario y máquinas de vapor. La historia del ferrocarril comienza desde 1837 cuando el presidente Anastacio Bustamante dio la primera concesión ferroviaria por 30 años a nombre de Francisco de Arrillaga, para conectar la capital mexicana con el puerto de Veracruz, pero este señor falleció tres años después, antes de tener avance significativo en la obra, así que en 1842 López de Santa Anna obligó a los constructores de la carretera de Perote a Veracruz a construir la vía de Veracruz al río San Juan. En seis años no se pudo construir más que siete kilómetros. Luego de transcurrida la invasión norteamericana de 1848, se reiniciaron los trabajos para conectar hasta el Molino en 1850 que sumaba la distancia de 13.6 kilómetros. Ese mismo año Santa Anna concesionó a Laurie Rickards la línea de Veracruz a México, sin poder concretar el proyecto. En 1855 concesionó ahora a los hermanos Masso el ferrocarril de San Juan Veracruz hacia Acapulco, pasando por la capital, pero en 1857 los Masso vendieron la concesión a Manuel y Antonio Escandón, quienes consiguieron apoyos del presidente Comonfort para no tener que vender la empresa. El presidente Juárez dio otra concesión a los Escandón, para una línea que uniera Veracruz al océano pacífico con un ramal a Puebla, y así se inició un servicio de transportación que consolidó Porfirio Díaz, quien se convirtió en el presidente que más kilómetros de ferrocarril ha construido en toda la historia. Este modo de transporte de personas dejó de ser negocio cuando el automóvil invadió el territorio nacional, así que dejó de darse ese vital servicio, pero el tiempo demostró la errónea estrategia por lo que ahora se está impulsando de nuevo su uso, pues se redujo sólo a transporte de mercancías. El actual presidente López Obrador está construyendo la Ruta del Tren Mayaa, un sistema ferroviario que conectará las diversas comunidades de la península de Yucatán. Esto ha provocado protestas entre ambientalistas y entidades dedicadas a proteger las riquezas naturales de México.
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