Julio 22 de 1948: Se consterna la Ciudad cuando se sabe que el peso mexicano se devaluó frente al dólar norteamericano, que pasa de 4.85 pesos por dólar, a 6.80 pesos por dólar, pues la economía regiomontana estaba dolarizada, dado que la maquinaria y muchos insumos para la industria eran importados. El gobernador Arturo B. de la Garza habló con los representantes de la iniciativa privada, es decir con industriales y comerciantes, para infundirles confianza en el manejo económico del gobierno de Miguel Alemán, y consiguió tranquilizarlos. 

Desde el inicio de la independencia nacional, en 1821, el gobierno retomó el sistema monetario con los patrones en oro y plata, decisión que fue ratificada en 1867 por el presidente Benito Juárez. El peso mexicano equivalía a 150 gramos de oro puro o su equivalente en plata, con un contenido de 224.75 gramos. Este valor era prácticamente igual al del dólar, por lo que se inicia esta nueva era con un tipo de cambio de un peso por un dólar. Como la plata empezó a cotizarse más barata que el oro, las monedas hechas de este material se volvieron las más populares. El peso mexicano se cotizaba en los mercados internacionales de acuerdo al valor del metal con el que estaba fabricada la moneda, no como divisa. En un lapso de treinta años el bajo precio de la plata hizo que el peso también bajara a una cotización similar al de la plata respecto del oro, es decir, un dólar valía dos pesos, tipo de cambio que duró hasta el año de 1913. En el periodo revolucionario, había cualquier cantidad de monedas, dependiendo qué grupo de revolucionarios las emitiera, por lo que no fue sino hasta el mes de octubre de 1918 que el presidente Venustiano Carranza estabilizó el valor cambiario. Pero la diferencia entre los valores del oro y la plata seguía creciendo, así que en 1933 se fijó un tipo de cambio de 3.60 pesos por cada dólar. Luego con la expropiación petrolera de Cárdenas en 1938 hizo que se devaluara el peso en 1940 hasta llegar a 4.85 pesos por dólar. Después vino la devaluación que hoy recordamos en esta efeméride del 22 de julio de 1948 y que terminó después de un año de sube y baja en 8.65 pesos por dólar en el año de 1949. Las siguientes devaluaciones fueron en 1954 a 12.50, valor que duró hasta 1976 con el presidente Echeverría que inició la debacle de nuestra moneda y que dos décadas después el presidente Salinas le quitó tres ceros a la moneda, es decir, mil pesos se convirtieron en un nuevo peso, hasta que hoy el tipo de cambio -que no es algo sólido porque está sobrevaluado-, es de más o menos 17 pesos mexicanos por cada dólar.