En el 2008, publicamos un texto acerca del Presidente nortemericano Lyndon B. Jonson, quien tendría en ese momento cien años de edad. Le tocó suceder al Presidente John F. Kennedy, cuando éste fue asesinado, ya que era el Vice-Presidente. Johnson concluyó el período presidencial de Kennedy y fue electo para uno nuevo. Su vida y su obra ya forman parte de la Historia. En la ciudad de Austin, la capital texana, existe una importante Biblioteca Presidencial que lleva su nombre y en la cual se conservan libros, documentos y pertenencias de su administración.
Ese miércoles 11 de febrero del 2008, fecha que apareció nuestro artículo "Centenario de Lyndon B. Johnson", mi amigo, el maestro Arturo Berrueto González, exalcalde de Saltillo, con quien me reuní en esa ciudad, me sorprendió con una interesante anécdota acerca de este personaje. Arturo está lleno de vivencias y de recuerdos. También lo está pleno de obras. Siempre es agradable platicar con él o con sus libros.
Actualmente, Arturo es el Presidente del Colegio Coahuilense de Investigaciones Históricas y ya recibió con anterioridad la Presea "Saltillo" al Mérito Cívico. Hace unos días fuimos testigos del otorgamiento de la Medalla al Mérito Histórico a este destacado historiador que no sólo se ha distinguido por sus libros, sino que también se ha dedicado a impulsar las obras de los demás.
La anécdota que nos contó en aquella ocasión el maestro Berrueto se refiere precisamente a Lyndon B. Johnson. Durante una visita que un grupo de coahuilenses realizó a la ciudad de Austin, Texas, fueron invitados a visitar la Biblioteca Presidencial Lyndon B. Johnson. Cuando recorrían las instalaciones, alguien se acercó al grupo para decirles que, en ese momento, en la Biblioteca se encontraba el exPresidente y que existía la oportunidad de saludarlo.
De inmediato se organizó la entrevista, precisamente en un lugar de la Biblioteca que es una réplica de la sala oval que ocupó Johnson en la Casa Blanca. La entrevista fue cordial y se centró en un tema que escogió el exPresidente: las ciudades de Saltillo y Monterrey.
Johnson sorprendió a los visitantes cuando les comentó que fueron precisamente Saltillo y Monterrey, los lugares donde pasó su luna de miel en noviembre de 1934 después de haberse casado en San Antonio, Texas, y que ese momento jamás habrían de olvidarlo ni él ni su esposa Claudia Taylor, mejor conocida como Lady Bird Johnson. Felices tiempos aquellos cuando pudieron recorrer solos las calles de nuestro país, sin la compañía de guardaespaldas.
En la entrevista con el expresidente de los Estados Unidos, los coahuilenses le hicieron preguntas relativas a otros lugares, pero él insistía en abordar el mismo tema: las ciudades de Saltillo y Monterrey, que tan gratos recuerdos le traían. Y habló maravillas de ese momento tan importante en su vida.
Hasta aquí la anécdota. Vayamos ahora a otro asunto.
Ahora hablemos del maestro Berrueto. Sin duda, se trata de un coahuilense distinguido: el profesor Arturo Berrueto González. Destaca como historiador y autor de libros, pero son más, muchos más, los libros de otros autores que el maestro Berrueto ha impulsado.
Entre los historiadores actuales, Saltillo tiene a un importante grupo que integra el Colegio Coahuilense de Investigaciones Históricas. Como miembros figuran, entre otros, el maestro Arturo Berrueto González, quien es su Presidente; Lucas Martínez, Armando Fuentes Aguirre "Catón", Alfonso Vázquez Sotelo, Javier Villarreal Lozano, ílvaro Canales, Manuel Gil Vara y María Elena Santoscoy. Cada uno de ellos ha aportado sus mejores esfuerzos a la promoción y difusión de la historia y la cultura. No podemos olvidar a dos de los socios ya fallecidos y grandes amigos nuestros: el profesor Jesús Alfonso Arreola Pérez y el Lic. Roberto Orozco Melo.
La semana anterior nos reunimos de nuevo en Saltillo para hablar en torno a la trayectoria del Maestro Berrueto, durante un evento en la Librería Carlos Monsiváis, frente a la Alameda. Con anterioridad este distinguido coahuilense ha recibido la Presea Saltillo y la Mdalla al Mérito Histórico "Capitán Alonso de León", que otorga la Sociedad Nuevoleonesa de Historia, Geografía y Estadística.
En esta ocasión se le otorgó la Medalla al Mérito Histórico de la Librería Monsiváis y de la Red Estatal de Bibliotecas de Coahuila. La Sala Julio Torri resultó insuficiente para dar cabida a todos los asistentes. Algunos quedaron de pie y otros pasaron a una sala contigua, que se habilitó con sillas y una pantalla grande para transmitir el evento.
En esta ocasión fue un honor compartir la mesa con nuestro amigo Manolo Gil Vara, Cronista de Ramos Arizpe, con el Lic. Alfonso Vázquez Sotelo, Coordinador de la Red Estatal de Bibliotecas y con el maestro Arturo Berrueto González.
Desde hace tiempo se ha dado en llamar a Saltillo "la Atenas de México", por el florecimiento cultural que ha tenido esta ciudad que ha contado con poetas como Manuel Acuña, escritores como Julio Torri y Artemio de Valle Arizpe; gobernantes como Andrés S. Viseca, Francisco I. Madero y Venustiano Carranza; pintores como Rubén Herrera y Octavio Morales; artistas como Fernando Soler; maestros como Federico Berrueto Ramón, Rubén Moreira Cobos y Andrés Osuna; historiadores como Ildefonso Villarello Vélez, Oscar Flores Tapia, Vito Alessio Robles, Artemio de Valle Arizpe, Carlos Pereyra, Francisco L. Urquizo. Y, por supuesto, Jesús Alfonso Arreola Pérez.
El maestro Arturo Berrueto González, exalcalde de Saltillo, es hijo de aquel gran educador que fue el maestro Federico Berrueto Ramón. Además de los propios libros que él ha escrito, se ha dedicado a impulsar los libros de otros. Suman alrededor de 600 publicaciones las que ha fomentado a través de la Dirección Editorial del Estado. Es además primo de otro personaje, el Lic. Eliseo Mendoza Berrueto, quien ha sido Gobernador del Estado y también ha sido Subsecretario en dos ocasiones en el país.
En una visita que hace algunos años hicimos a Saltillo, acompañando a mi paisano Eulalio González "El Piporro", el actor, compositor y cantante fue entrevistado por un grupo de jóvenes, quienes le preguntaron si era triste llegar a viejo. De inmediato respondió: "Que curioso, dijo Lalo, primero me dicen que bien se ve, luego me dicen "Por favor cuídese". Y en seguida esta pregunta: Que si es triste llegar a viejo. Yo les contesto así: "Es más triste no llegar".
Lo cierto es que para llegar a viejo, nos diría en otra ocasión el Lic. Eliseo Mendoza Berrueto, primo del homenajeado, se tienen que combinar muchos factores, muchas circunstancias. En primer lugar están los genes que determinan la calidad de los cromosomas que se van a multiplicar en millones de células que forman nuestro cuerpo con todos sus órganos. Luego está el amor con que nos cuidan nuestros mayores y la calidad de vida familiar, escolar y social. También cuentan el medio ambiente, la libertad, la tranquilidad y la seguridad en el seno de la sociedad.
"Desde luego uno tiene que poner su parte. Y, sobre todo amar la vida. Hay además algo consustancial a todo lo anterior: el respeto y el afecto al prójimo. Así podrá uno vivir en paz consigo mismo y en armonía con la sociedad. Para mí --comentó Mendoza Berrueto--, creo que los mejores vigorizantes han sido la inspiración y el ejemplo que me dieron mis padres, la solidaridad de mi familia, el afecto de mis amigos y el compromiso con la sociedad. Trabajar con ahínco y no dejar de aprender algo cada día es un fuerte estímulo para amar la vida".
En el caso de Arturo, quien tiene ahora 86 años de edad, su existencia se cuenta más que por los años de vida, por la calidad de la misma. Hemos de concluir y lo haremos con las palabras que por nuestro conducto le envió el Lic. Julio Zamora Bátiz, Presidente de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística:
"Arturo Berrueto es un ejemplo de organizada tenacidad y de sistemático esfuerzo en el cumplimiento de sus responsabilidades, que conjunta con su bonhomía y don de gentes. Pocos merecen el reconocimiento de los mexicanos como el Maestro Berrueto, formador de mejores mexicanos, analista profundo de nuestra vida colectiva y eficaz servidor de la colectividad, que merecidamente recibe hoy el calor humano de sus amigos y paisanos".