Aunque la mayoría de los estados en donde se celebraran elecciones el próximo domingo 5 de junio enfrentan grandes dificultades económicas es, sin duda, Veracruz el estado que enfrenta las peores circunstancias. Por lo mismo, reproducimos aquí una entrevista publicada en el diario La jornada de Veracruz este fin de semana: "David Rojas dirigente de la Unión Zapatista de Apoyo a Deudores (UZAD) advierte que el próximo gobernador, "no tendrá margen de maniobra en materia económica y será la prolongación de la actual crisis del estado.
En la siguientes tres décadas, previene, "los veracruzanos deberemos de aprender a vivir en pobreza y en algunos casos en extrema debido a las condiciones económicas en las que se encuentra el gobierno del estado. La deuda que se contrajo en la actual administración es enorme y lo peor es que la actividad institucional estará paralizada". "La economía estatal está en la ruina, tenemos un gobierno del estado que cierra su administración ataviado en deudas y esto lo que provoca es la parálisis de la actividad gubernamental. No hay dinero para invertir en obras de ningún tipo, no hay forma de reactivarlo en los siguientes años", sostiene.
Los números actuales, expone, "nos condenan a vivir en una realidad de desesperanza y ahora dependemos de que el gobierno federal asista al nuevo gobernador del partido que sea, porque la deuda que recibirá es enorme, le dejan deja un estado endeudado y que hay que decirlo, no se ve por donde, en un dos años pueda resolver los problemas de las familias veracruzanas". Pero los problemas de la economía estatal, apunta, "igual afectan de forma indirecta a las familias de los veracruzanos, pues al no haber circulante de dinero, de inversión de frena la economía en general, no hay empleos y eso provoca que las familias se endeuden. Algunos de ellos lo hacen con las cajas de ahorro que se convirtieron en los nuevos agiotistas con respaldo legal que de plano se apoderan de bienes e inmuebles de los deudores que no pudieron cubrir los pagos que deberían para liquidar su deuda".
A este escenario se le debe sumar el proceso electoral que pasa el estado, "la veda electoral paraliza la economía y en cuestión de semanas detiene la poca inversión de obra pública, con ello se agrava no haya fluidez de dinero circulante", según da a conocer. El problema, apunta, "es en todos los rincones de Veracruz. No hay una sola ciudad del estado que no tenga problemas por la crisis económica en la que el actual gobierno del estado metió a las finanzas veracruzanas, el problema lo vivimos desde Pánuco hasta las Choapas. Lo tenemos en la costa como en la sierra, pero en estas regiones especialmente se agrava debido a que no hay dinero para por lo menos intentar detener el avance de la pobreza". En las zonas serranas del estado, el problema económico es aún peor debido a que por las condiciones propias de esas regiones se complica aún más, "de ahí se hayan incrementado los índices de migración, la desintegración familiar, el abandono de campos cultivables y la derrota familiar. Es un problema serio que nunca fue atendido por la actual administración estatal". En las zonas urbanas, apunta, las amas de casa deben dejar sus actividades para trabajar y con ello poder contribuir al sostenimiento familiar, "a ello se le debe anexar que la mayoría de las familias, aun cuando tengan acceso a servicios de salud pública deben pagar medicamentos debido a su escasez en el sector salud; deben cumplir con los pagos escolares, porque ahora con la reforma educativa empiezan hacerse responsable del mantenimiento de las escuelas. Es un tema muy grave que debe ser atendido con prontitud".