GPS ECONÓMICO : SEPARATISMO FISCAL EN EL NORTE: Pacto suicida de 3….o 4

--Una republiqueta “off shore”, para lavado de dinero y evasión fiscal, controlada por los bancos, que luego se colapsaría.

Como lo demuestra el material que anexamos; si Nuevo león, Coahuila y Tamaulipas, se separan del pacto fiscal federal, la región pasaría a ser un enclave dominado por los bancos acreedores y con facilidades para el lavado de dinero sucio y la evasión de impuestos que colapsaría pronto al no poder sostener su economía.

Si los gobernadores de esos estados y aventureros como el senador Samuel García logran su propósito como lo han propuesto; la enorme deuda que consume en intereses y amortizaciones cada año ---mientras sigue creciendo--, entre un 35% (caso Nuevo León) y un hasta un 50% (caso Coahuila) de sus participaciones federales, sería el instrumento que permitiría a los bancos como Banorte-Interacciones de la familia Hank- González; BBVA de la aristocracia española; HSBC del gobierno británico; Multiva de la familia Vázquez Raña, etc., tomar el control de la región. El mecanismo del cobro de la deuda, a cuyo servicio Nuevo León destinará este año casi 14 mil millones de pesos provenientes de sus participaciones de sus participaciones federales o Ramo 28, ya que son las partidas que los estados pueden administrar a discreción y no están etiquetadas para propósitos específicos como las Aportaciones o Ramo 33; es el instrumento del que se valen estas familias para apoderarse CRECIENTEMENTE, de los recursos federales, la llamada Recaudación Federal Participable. Uno de alfiles de estas familias, el ex presidente Enrique Peña Nieto, promulgó, en 2016, la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas, que les obliga, a los estados, al “pago oportuno” de esas deudas, destinando, directamente, una parte de sus participaciones a los bancos y , además, las faculta para contratar “deuda para pagar deudas”, lo cual estaba prohibido en la Constitución hasta ese momento; y para pagar sus “reestructuras” las cuales, como la última que hizo Nuevo León hace dos años, cuestan al menos 10 mil mdp cada vez que se realizan. Como se puede ver en el material anexo, en el material anexo, la situación de los demás estados, los del norte y los de todo el país; es similar en cuanto a endeudamiento que la de Nuevo León; los separatistas del Río Bravo convertirían a sus “reinos” o a esta “República de la Sierra Madre”, el sueño del traidor Santiago Vidaurri en los 1860s; en pequeña jurisdicción endeudadas y sometidas a los banqueros y cuya recaudación de impuestos, si la hubiera, pasaría en automático a los bancos acreedores.

Si los gobernadores del noreste y el aventurero Samuel García estuvieran del lado patriótico de la historia, entenderían como entendió el presidente Benito Juárez, que la razón principal de las limitaciones por la cuales las naciones y los gobiernos estatales o “sub nacionales” (como les dicen los banqueros y calificadoras); no pueden llevar a cabo sus funciones plenamente --- ----NL, por ejemplo, este año sólo destinará un 1% de su presupuesto total de 105 mil mdp, sólo unos 2 mil mdp para inversión física--, precisamente por el enorme fardo de la deuda, que en el caso de Nuevo León creció de los 17,379 mdp en el 2009 a los 70,617 mdp que es actualmente, a pesar de que, durante esos dos sexenios, se pagaron entre 5 y 12 mil mdp anuales y se realizaron costosísimas reestructuras. La deuda se pagó varias veces y de todas formas creció. La historia de Coahuila es igualmente patética y cruel. Ese estado debía 35 mil mdp a la salida de Humberto Moreira, su hermano Rubén pagó en 6 años unos 34 mil mdp, y la deuda sigue siendo de más 35 mil mdp. La deuda de todos los estados o entidades federativas es una historia parecida, pues pasó de los 70 mil mdp del año 2000 a los 640 mil mdp del 2019. Sólo en el año pasado los gobiernos estatales dedicaron unos 85 mil mdp al pago de intereses y pequeñas amortizaciones. En todos los casos, para elaborar la Ley de Egresos de cada año, se suma los recursos federalizados, es decir lo que se recibe del centro, más los ingresos propios y siempre hay un faltante y, por lo tanto: Se contrata más deuda!!. La deuda eterna. Pero no para obras o grandes proyectos, sino para la creciente nómina y los lujos y prebendas de los altos funcionarios; los adquisiciones infladas con empresas de los compadres o los aliados políticos y, para los bancos. La historia de nuestro país no es mejor pues pasamos de una deuda total de 2 billones 051 mmdp en el año 2000, a los 11 .2 billones que es en este 2020. Cada año se destinaron al servicio de la deuda entre los 100 mil y los 742 mil millones de pesos, y la deuda creció, por las mismas razones que en los estados. Así mientras que en el 2019 el gobierno federal destinó 740 mil mdp al servicio de la deuda, sólo pudo destinar a los 32 estados 919 mil mdp en participaciones. Si realmente se quieren más recursos para cada estado, entonces se debe auditar esos tres renglones del gasto: Servicios personales o nómina; proveedores de rubros como desarrollo social o desarrollo económico e infraestructura y el servicio de la deuda y los contratos y acuerdos con los bancos. Los gobernadores podrían rescatar de ahí mucho más que lo que obtendrían si se aumenta el porcentaje de la Recaudación Federal Participable, actualmente de un 20% por ley, a un 25 o 30% como seguramente propondrán, para destinar a las participaciones o Ramo 28.

Por otro lado, si al separarse del pacto fiscal como lo proponen decidiera cobrar sus propios impuestos, tendría que enfrentarse al hecho de que los grandes grupos empresariales locales como FEMSA, Cemex, o Proesa, para citar sólo unos ejemplos; han mantenido su solvencia en las últimas dos décadas, gracias a que no pagan o difieren sus impuestos por la vida de la consolidación fiscal y la simple evasión vida facturación falsa, un negocio que el senador Samuel García conoce muy bien. Este el caso que ilustramos aquí de FEMSA que en el 2018, convirtió en “activos” unos 10 mil mdp en “impuestos diferidos”, un asunto que motivó que el consejo directivo solicitara una auditoría externa. El caso Cemex fue muy sonado en los años 2010 a 2012, cuando pudo mantener su solvencia gracias a un “diferimiento” de más de 20 mil mdp en impuestos. Lo de Proesa y Metalsa es menor, sólo 350 mdp, igual que el del Hospital San José. Con una base tributaria así, cualquier “reino” norestense se colapsaría y tendría que recurrir a la instalación de más casinos, hipódromos, aéreas turísticas y demás negocios de Narcotráfico S.A., o de plano, invitar a que empresas de otras partes del mundo y del país, establezcan sus “razón social” en esta republiqueta, para evadir impuestos en sus países, como se hace en las Bahamas o Panamá. Y eso no es todo, sólo para terminar; considérese el hecho de que, por ejemplo, la cadena OXXO de FEMSA, reportó el año pasado un total de 17,400 tiendas, de las cuales sólo 1365 operan en Nuevo león y el resto en otros estados del país, incluyendo 1638 en el área del Valle de México y sólo 159 fuera de México. Así operan otras empresas como Cemex, Coca Cola de la familia Barragán, bancos como Banregio y el propio Banorte, etc. Considerando además de que Nuevo León sólo genera el 7.6% del PIB nacional, un billón 700 mil pesos de un total de 20 billones 221 mil mdp anuales; y que las otras grandes zonas industriales del país, el EDOMEX y la CDMX generan 4 y medio billones de pesos, Nuevo León tendría que empezar a desarrollar relaciones de “exportación e importación” con el resto del país y sobre todo con el centro, e igual tendrían que hacer muchísimas empresas, y eso conduciría al caos y el colapso de la economía estatal y regional. La exigencia de modificar la Ley de Coordinación Fiscal de 1978 es antes que salir del pacto fiscal suena más realista, pero dada la estrechez financiera en que se desenvuelve el gobierno federal en este momento frente a la pandemia de Covid-19 y la depresión económica mundial; es mejor ir a una mesa de negociaciones con banqueros, proveedores y con la plantilla de funcionarios, para recuperar de los rubros mencionados arriba mucho más dinero que lo que significaría un aumento de 5 o 10% en las aportaciones federales. Se tiene que tomar en cuenta que la aportación de Nuevo León en materia de impuestos no es, como blofea Samuel García, de unos 450 mil mdp anuales, sino de unos 229 mil mdp en realidad, de acuerdo al cálculo de Marco Antonio Pérez Valtier, conocido fiscalista neolonés. Los gobernadores de los estados del Noreste y el senador Samuel García deberían considerar, y esto es lo más importante; que el exigir en este momento de pandemia y crisis económica global, una parte mayor de los recursos que pertenecen a toda la nación, en lugar de buscar un acuerdo y la revisión de sus propios gastos, sus contratos y facturación sobrecargada, sus acuerdos leoninos con los bancos etc. como lo señalamos arriba, es equivalente al motín y a la traición.

file:///C:/Users/Lenovo/Downloads/cefp0332019.pdf

https://heraldodemexico.com.mx/mer-k-2/recaudacion-federal-participable-pierde-en-distribucion-durante-2019/

http://www.nl.gob.mx/series/deuda-publica

https://www.cefp.gob.mx/edospef/2020/ppef/nl.pdf

file:///C:/Users/Lenovo/Downloads/cefp0432018.pdf

file:///C:/Users/Lenovo/Downloads/Ley_Coordinacion_Fiscal.pdf

file:///C:/Users/Lenovo/Downloads/cefp0502019.pdf

file:///C:/Users/Lenovo/Downloads/eecefp0022016%20(1).pdf

https://www.finanzaspublicas.hacienda.gob.mx/work/models/Finanzas_Publicas/docs/congreso/infotrim/2019/iit/05adp/itandp01_201902.

https://www.forbes.com.mx/el-banco-que-presta-a-estados-y-municipios-y-mantiene-el-riesgo-bajo/

http://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5434883&fecha=27/04/2016

file:///C:/Users/Lenovo/Downloads/eecefp0022016%20(1).pdf