Agosto 29 de 1937: se inaugura la Plaza Monumental Monterrey Lorenzo Garza. Este coso ubicado en la ahora avenida Alfonso Reyes de Monterrey, que conduce a la actual Ciudad Universitaria y hasta el municipio de Escobedo, se estrenó con el siguiente cartel: Lorenzo Garza, Fermín Espinosa Armillita y como sobresaliente Silverio Pérez, quien estaba a punto de recibir su alternativa, y los toros eran de La Punta. En esa época los amos y señores de los ruedos en México eran Lorenzo Garza y Fermín Espinosa Armillita, por lo que la afición de Monterrey estaba de plácemes y la prensa local, feliz.
Ocho años después de la inauguración de la Plaza de Toros Monterrey, vino el gran Manolete a nuestra ciudad, pero actuó en El Coliseo y no en ella. Sin embargo, el destino era que la Plaza de Toros Monterrey, substituiría y superaría a la desaparecida plaza El Coliseo, pues su estructura, a diferencia de las anteriores de madera, era de concreto hidráulico y el espacio exterior más amplio. Pasa el tiempo, muchas corridas, y se reinaugura remodelada el 17 de noviembre de 1963, con Juan Silveti, Juan García Mondeño, Mauro Liceaga y de nuevo con toros de La Punta. El empresario César Garza le había agregado más espacio hacia arriba, convirtiéndola en Monumental.
El cupo pasa de 12 mil espectadores a 17 mil. Leodegario Hernández, otro gran empresario, instala un moderno techo que fue asombro de muchos pues la coloca como la más moderna del mundo, y los toreros presumían en su curriculum haber toreado en ella. Para estrenar el coso renovado y ampliado, el 17 de noviembre se monta una corrida de reinauguración en honor de Lorenzo Garza, y la gente añade un nombre más a los dos que ya tenía: “el Ave de las Tempestades”. Ahora la plaza es conocida por Monumental Monterrey Lorenzo Garza.
Inolvidables tardes de gloria se han celebrado en ella a lo largo de sus ochenta años que hoy cumple. En ella se han dado muchas alternativas, pero sin duda, las dos más importantes fueron la de Manolo Martínez y Eloy Cavazos, coincidentemente ambas organizadas por Leodegario Hernández. Lorenzo Garza, ya retirado, regresó sólo para darle la alternativa a Manolo Martínez con el testimonio de Humberto Moro y astados de Mimiahuapam. Esa tarde del 7 de noviembre de 1965 nació un gran torero: Manolo Martínez. Un año después, el 28 de Agosto del año de 1966, otro monstruo de los ruedos, Eloy Cavazos se convierte en matador y también escala la cúspide del toreo nacional e internacional.
A Eloy le dio la alternativa Antonio Velázquez y el testigo fue Manolo Martínez quien estuvo enorme esa tarde. Este trío de gigantes de la tauromaquia, formado por Lorenzo Garza, Manolo Martínez y Eloy Cavazos, orgullosamente regiomontanos, justifica la erección de la plaza Monumental Monterrey, Lorenzo Garza y ubica a nuestra ciudad en el mundo de la fiesta brava, actividad un poco venida a menos por un importante movimiento de personas que no gustan de las corridas de toros y han formado opinión en su contra. Sin embargo, aquí en Monterrey sigue habiendo una gran afición a fiesta brava, la primera actividad pública masiva que tuvo nuestra ciudad desde su fundación.