23/Apr/2024
Editoriales

La maravilla de amanecer cada día

En opinión de Armando Fuentes Aguirre "Catón", nuestras instituciones están llenas de defectos, corrupción e ineficacia. Pero tenemos que aferrarnos a ellas como único medio de perfeccionarlas. Es el camino que nos señala la razón. La inmensa mayorí­a de nuestros gobernantes se sienten absolutos de incumplir las leyes. Incurren en la frivolidad, en excesos y corrupción. El dí­a en que México sea un estado de derecho dejará de ser un estado de desecho".

Lo anterior lo dijo el periodista durante el más reciente reconocimiento que le hizo la Universidad Autónoma de Nuevo León, por conducto de su Rector, el Ing. Rogelio Garza Rivera, en el Aula Magna de la UANL. Con anterioridad, la UANL le ha hecho otros homenajes, entre ellos le otorgó el Doctorado Honoris Causa en el año 2013.

"Agradezco este homenaje infinitamente –expresó Catón-- porque viene, primero, de una universidad tan prestigiosa, de tanta dignidad y de elevada excelencia, y luego, porque me da la oportunidad de estar presente ante mis lectores regiomontanos, nuevoleonenses. A esta ciudad hermosa debo yo el pan de mi familia, aquí­ he recibido desde hace más de medio siglo la hospitalidad señorial que caracteriza a la gente de Nuevo León, de Monterrey".

El periodista fue reconocido ante un presí­dium conformado por el Ing. Rogelio Garza Rivera, rector de la UANL, Celso José Garza, secretario de Extensión y Cultura de la UANL, y Antonio Ramos Revillas, director de la Editorial Universitaria.

El editorialista comentó: "Creo que yo me encuentro ya al final de ese camino (de la vida). En estos dí­as, el viernes 8, es su cumpleaños número 78. "El privilegio es llegar acompañado por gente que te quiera y ese es un premio al hecho humilde pero profundo, de haber sido parte de la alegrí­a de los demás y no parte de su tristeza o de su sufrimiento (...) El hecho mismo de estar en este mundo es un prodigio que a veces no apreciamos, la maravilla de amanecer cada dí­a".

"En una ocasión, Marx, Marx el bueno, gran comediante, --agregó-- fue objeto de un homenaje y dijo: no me lo merezco, pero tengo artritis y tampoco la merezco; señor rector, yo no merezco tampoco este homenaje y mi gratitud crece porque yo no tengo artritis, tengo completas todas las facultades de mi cuerpo, al menos de la cintura para arriba, digo porque batallo para caminar.

"Y a los muchos motivos de gratitud, que tengo con esta nobilí­sima casa de estudios, la Universidad Autónoma de Nuevo León, añado entonces uno más, que le agradezco a usted como representante de los universitarios, desde el fondo más hondo de mi corazón ", expresó .ante el Rector.

Agradeció además de la presea, la hospitalidad que los nuevoleoneses le han brindado a lo largo de más de cincuenta años. Comentó que los libros siempre lo acompañaron en su infancia, y aunque aclaró que su familia no era solvente económicamente hablando, los libros formaban parte del mobiliario de la casa. "Decir que éramos pobres serí­a en primer lugar melodramatismo y luego serí­a mentira; quién sabe cuál de las dos cosas sea peor; pero tampoco éramos de condición desahogada. Pero no me explico cómo mis padres se las arreglaban para comprar quizá cada mes un libro".

ERAN TAN POBRES QUE

Sí“LO TENIAN DINERO

Luego dijo: "Yo recuerdo que iba a las casas de mis amigos y veí­a que en sus casas tení­an pisos de mosaico, techos de tejas y habí­a en ellos un jardí­n y en mi casa no habí­a nada de eso; pero yo salí­a de esas casas compadeciendo a sus habitantes y yo decí­a para mí­: han de ser pobres, no tienen libros; y no me equivocaba, eran pobres, tan pobres, qué lo único que tení­an era dinero, no tení­an libros", reflexionó.

Catón es considerado el columnista más leí­do del paí­s y un personaje entrañable para la Universidad Autónoma de Nuevo León, que le otorgó en el 2003 el Doctorado Honoris Causa. Armando Fuentes Aguirre nos brinda cada dí­a lecciones de humanismo y de humorismo. Es un ser que nos sorprende con su capacidad, sus conocimientos y, sobre todo, su generosidad. A diario, miles de lectores de todo el paí­s y de otras partes disfrutamos de la lectura de sus columnas. Una de ellas, "Mirador" nos invita a pensar. La otra, "De Polí­tica y cosas peores", nos comunica su entusiasmo y nos contagia su buen humor.

Sus columnas se publican en más de 150 periódicos de México. "Lo hago –dice-- para establecer contacto con la gente. Hay un gran amor al prójimo atrás de mis chistes y el deseo de comulgar con él en la santa eucaristí­a de la risa. Yo no sé qué serí­a de este Paí­s si no tuviéramos esa capacidad, que no es relajo, sino un modo muy sabio de ver la vida y de conjurar sus males con la magia de reí­r. Tengo una gran fe en el género humano. No puedo darme el lujo del pesimismo, porque si incurro en eso falto a tres virtudes en las que creo: la fe en Dios, la esperanza en el hombre y la caridad que es el amor a la gente".

Armando es también autor de una serie de libros de Historia de México, sobre personajes como Hidalgo, Juárez, Porfirio Dí­az, Santa Anna, así­ como "Plaza de Almas", "Mirador de Catón", "Lo mejor de Catón", "Cuentos de todos" y algunos libros de humorismo.

¿ESTADO DE DERECHO

O DE DESHECHO?

El Rector de la UANL, Rogelio Garza Rivera, le entregó el reconocimiento, acompañado de los efusivos aplausos de los asistentes. En su plática, Catón confesó que al escribir no piensa en el lector, televidentes o escuchas y, por esto, pidió disculpas. "Y no lo hago porque puedes caer en la terrible tentación de adular. Y adular te impide ser lo que tú eres. No escribo para, escribo por", puntualizó el fundador de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Autónoma de Coahuila.

Reconoció que eso quizá sea reprochado por sus cuatro lectores. "Me reprochan mis lectores. Algunos me han dicho que me van a dejar de leer, incluso alguno lleva hasta 15 veces que me ha dejado de leer", que fue acompañado con la risa de todos en la sala. Y añadió, "pero prefiero eso a traicionar lo que pienso y lo que siento".

Por otra parte, al referirse a sus libros de Historia, dijo: "Estamos reconociendo que hombres y mujeres de nuestra historia no eran perfectos, eran humanos, capaces de grandezas pero también de mezquindad. Nuestra historia es maniquea. Nada es totalmente bueno o malo".

"Alguien dijo –comentó-- que la democracia es el peor sistema de gobierno que hay, pero no existe otro mejor. La inmensa mayorí­a de nuestros gobernantes se sienten absolutos de incumplir las leyes. Incurren en la frivolidad, en excesos y corrupción. El dí­a en que México sea un Estado de derecho dejará de ser un Estado de desecho".