21/Nov/2024
Editoriales

Los alcaldes de Monterrey. Parte quincuagésima cuarta, cap. 3

Para el año de 1898 el abiertamente tiránico gobierno de Porfirio Díaz, no vencía aún la férrea voluntad de los reineros. Para la presidencia municipal de Monterrey del año 1898 se repitieron los resultados del año anterior: el pueblo votó para alcalde primero propietario a Adolfo Zambrano, pero el aparato porfirista impuso a Pedro C. Martínez.

 

Conceden licencia a Zambrano y asume la alcaldía, Pedro C. Martínez

Ciertamente la falta de legitimidad al frente del Cabildo no privó a Martínez de sus méritos en el progreso de Monterrey. Anticipando lo que sucedería, a la primera sesión del año no acudió el alcalde, y hubo de presidirla el regidor primero, de apellido Peña. Fue hasta el 10 de enero de 1898, cuando se concedió “licencia ilimitada” a Zambrano, y Martínez reasumió la presidencia municipal de Monterrey:

  “… 10 de Enero de 1898. Presidencia del Doctor P. C. Martínez…  Avisa que al Sr. Alcalde 1o. Propietario le fué concedida una licencia ilimitada para separarse del despacho de la Presidencia. De enterado y que se haga saber las oficinas respectivas. Contesta enterado de que el Sr. Alcalde 1o. Suplente tomó posesión de la Presidencia Municipal, el día 4 del presente mes, por virtud de la licencia y concedida al Propietario. Archivo”
[1] 

 

Pedro C. Martínez, alcalde primero suplente en funciones. Del 4 de enero al 31 diciembre de 1898. 

 

Como vimos en “Los Alcaldes de Monterrey, quincuagésima tercera parte, dos de tres”. la ciudad participó en la Exposición Internacional de Historia Natural celebrada en Chicago, presentando algunas  “curiosidades”. Por esta participación la ciudad recibió una medalla y un diploma:

  “… 17 de Enero de 1898. Presidencia del Dr. Pedro C. Martínez…  Remite una caja conteniendo la medalla y diploma que obtuvo como premio este municipio en el Certamen Universal Colombino celebrado en Chicago… se mande la medalla la Tesorería Municipal para que allí sea conservada en depósito”

 

Financia el ayuntamiento el teléfono de la Inspección de Policía 

en el poblado Gonzalitos

Veamos los gastos cotidianos que tenía el ayuntamiento, para obras como la pavimentación (empedrado) del patio del palacio municipal, y otros gastos comunes del funcionario llamado Fiel Contraste (inspector de pesos y medidas). El teléfono de la ynspeccion (sic) de Policía No. 2 y la renta del local de la Escuela para niñas del poblado llamado ‘Gonzalitos’, que era una gran área agrícola en lo que hoy están las colonias Vista Hermosa, Gonzalitos, el área del actual campus de Ciencias de la Salud de la UANL y Galerías Monterrey, habitada por una numerosa población de migrantes de países orientales.

 “…  1o. de Febrero de 1898. Presidencia del Sr. Dr. Martínez… moción del Sr. Presidente, esta H. Corporación acordó que, previa la correspondiente superior autorización, se gastara la suma de $ 211.00¢ que importaran los trabajos de pavimentación del patio del Palacio Municipal. El mismo Sr. Presidente manifestó que en el Presupuesto Municipal vigente se había omitido consignar las partidas de $ 5.00¢ de los gastos de oficio de la Oficina Municipal de Fiel Contraste, de $ 2.00¢ para pago del teléfono que tiene su servicio la Ynspección de Policía no. 2 y de otros $ 2.00¢ para el pago de la renta del local que ocupa la Escuela de niñas de Gonzalitos; y que como eran gastos urgentes é indispensables, pedía que fueran aprobados fin de que se hicieran constar en el Presupuesto referido”

 

Invertía el ayuntamiento que presidía Martínez en obras públicas

Durante las múltiples administraciones de Pedro C. Martínez se empedraron o adoquinaron casi todas las calles y plazas de la ciudad. Por ejemplo, el remozamiento de la Plaza Bolívar. Este espacio público fue notoriamente mejorado, pues su cercanía a la casa de Bernardo Reyes el Cuartel militar (Padre Mier y Cuauhtémoc) así lo ameritaba. Incluso también se guapeaba la joya gótica de la ciudad, el Templo de San Luis Gonzaga, que era frecuentada por la familia Reyes Ochoa:

  “Sesión ordinaria del día 7 de marzo de 1898. Presidencia del Dr. Pedro C. Martínez… expresó el C. Presidente, era de todo punto útil y conveniente proceder, desde luego, pavimentar con ladrillo, la Plazuela y Calle de Bolívar, y teniendo presente que la mayor parte de los vecinos ó dueños de fincas ubicadas en aquellos lugares, habían ofrecido contribuir para la obra con la suma de $ 2,227.22 centavos”

  Tanto Porfirio Díaz como Bernardo Reyes -y otros gobernadores, senadores y diputados- habían tenido participaciones importantes en la Invasión Francesa de 1862-1867 por lo que daban gran importancia a las batallas de esta gesta del 5 de Mayo, la Batalla de Puebla de 1862; el 2 de abril de 1867 la toma de Porfirio Díaz de la Ciudad de México y el 15 de Mayo de 1867 Toma de Querétaro y captura del Emperador Maximiliano por Mariano Escobedo. Para su legitimación, en todo el país se celebraba con gran lujo; veamos cómo el propio alcalde era uno de los organizadores de la fiesta:

  “… 11 de Abril de 1898. Presidencia del Dr. Pedro C. Martínez… este R. Ayuntamiento tuvo bien acordar que el Señor Presidente, asociado del Comisionado de Festividades, preparara las fiestas con que en el presente año deber celebrarse el triunfo obtenido por las fuerzas republicanas frente los muros de Puebla el 5 de Mayo de 1,862; autorizándolo para hacer los gastos que fuere necesario erogar para tales fiestas”

 Uno de los actos más vistosos de la administración de 1898 fue la colocación de un Reloj  monumental en el Parián -luego Mercado Colón, hoy Interplaza- hay que notar que aunque ya mucha gente usaba relojes de bolsillo o pulsera, cada quien lo ajustaba según un cálculo personal de la hora, la posición del cielo (generalmente su punto más alto en el cielo, como el mediodía) por lo que un reloj público permitía homologar la hora de los reineros. Claro, este reloj requirió de una gran inversión:

  “Sesión ordinaria del día 25 de Abril de 1898. Presidencia del C. Doctor Pedro C. Martínez… aprobó el gasto de la cantidad de $1,016.00 ¢ que se ha hecho ya en la compra de un reloj que se destina para el edificio del Parián y el de $150.00 que importa la colocación de dicho reloj; en el lugar correspondiente”

  Pedro C Martínez realizó obras de ornato por todo el centro de la ciudad, arreglando calles, banquetas fuentes, plazas:

  “…4 de Julio de 1898. Presidencia del C. Dr. Pedro C. Martínez… La de Ornato y Paseos informó que en el mes de Junio último se había construido en la Alameda "Porfirio Diaz" con grasas, arena y tierra, uno de los andaderos principales por el Oriente, entre la Calzada destinada al paces de coches y la primera fuente: que dicha obra había sido apoyada, en ambos lados, sobre un resistente cordón de piedra de cuatro: que en la Calzada "Progreso" se había concluido el pavimento, sistema Mac Avande la manzana comprendida entre las calles de General Treviño é Ysaac Garza, construyéndose, en la calidad, la pavimentación del trecho comprendido entre esta última calle y la de General Tapia: que en la Plaza de Parian se hicieron algunas reparaciones, indispensables, al lecho inferior del Kiosko y que se habían compuesto varias bancas en esta plaza y en las de Zaragoza é Hidalgo y que los gastos erogados habían ascendido $2061.67”

 

Aporta recursos el alcalde Pedro C.Martínez, para construir una ‘Casa de dementes’

Durante el gobierno de Martínez, por primera vez el estado se hizo cargo de los enfermos mentales, que anteriormente eran atendidos por su familia; el municipio hizo una aportación económica para la construcción de una “casa de dementes” que se construyó anexa a la penitenciaría del Estado que estaba en la Alameda.

  Debemos aclarar que no era un hospital, sólo era un asilo en donde se sedaba a los enfermos con opiáceos o “adormideras” y se les apartaba de la sociedad. En algunos casos la familia del enfermo aportaba para su sostenimiento y los gastos de los enfermos de familias menesterosas eran cubiertos por su municipio de origen. 

 

Clínica para enfermos nerviosos y mentales del Dr. Manuel Camelo

El primer hospital mental de Monterrey con método científico y con el fin de mejorar la salud de los enfermos fue la Clínica para Enfermos Nerviosos y Mentales en Colonia Independencia fundada en 1937 por el doctor Manuel Camelo Camacho uno de los primeros médicos psicofarmacólogos del país:

  “Sesión extraordinaria del día 27 de Julio de 1898. Presidencia del Dr. Pedro C. Martínez… se acordó que los indicados fondos se cedieran al Ejecutivo del Estado para que con ellos mandara construir una casa para dementes: que como el pensamiento que había decidido los accionista tomar una determinación tan landable, era todas luces benéficas humanitario, había, en, nombre de este R. Ayuntamiento, cedido la cantidad que al Municipio le correspondiera de los fondos aludidos, por las dos acciones que representa y que, pedía para tal cesión, la confirmación correspondiente”

 

Le toca al alcalde Martínez la llegada de la Pandemia de fiebre amarilla

En 1898 el gobierno de Pedro C. Martínez enfrentó un reto sanitario mayor, con la llegada de la pandemia que afectó Europa y Asia, aunque no hay datos de África. Esta pandemia era de la fiebre amarilla, causada por el mosquito Aedes aegypti. Se establecieron cercos sanitarios en distintos puntos del país, pero la enfermedad llegó y se extendió por toda la ciudad de Monterrey y las demás poblaciones del estado.

 

El despliegue de acciones de contención de la pandemia

Las primeras acciones fueron el aislamiento de la gente infectada; la desinfección de habitaciones y ropa con bicloruro de mercurio o bien, en el horno del Hospital González (actual Hospital Universitario). 

  Los enfermos, si tenían posibilidades económicas, o vivían en viviendas seguras, debían recibir los cuidados en sus casas hasta recuperarse o morir.

  Si eran pobres o vivían en lugares insalubres (charcos, pantanos, ciénagas), se les enviaba a los diversos lazaretos principalmente en el Hospital González y cuarterones de madera construidos en plazas como la de Santa Isabel (Xicoténcatl y Madero) y de la Luz (Carbajal y de la Cueva). 

 

Cobra cruel pandemia 4 mil vidas de reineros en ocho años

La pandemia tuvo dos oleadas principales (1898 y 1903) matando a más de 500 reineros, y contagió a casi 4 mil personas en 8 años que duró antes de erradicarse.

 

Precauciones que se tomaban para enterrar cuerpos contagiados

Los cuerpos de los fallecidos debía enterrarse sobre dos capas de cal viva (óxido de calcio), que servía como desinfectante, y posteriormente, se cubría con tierra. Se prohibía asistir a los cortejos fúnebres y a los panteones. En cuanto a los medios de transporte, también debían desinfectarse los trenes de carga y los de pasajeros, los carros urbanos y los coches de sitio, de los que ya existían unos pocos. En esta acta se puede percibir el caos que se vivía en la ciudad.

  “…15 de Agosto de 1898. Presidencia del C. Dr. Martínez… Comunica que el Superior Gobierno del Estado, fin de evitar el contagio de la fiebre amarilla, desarrollada en el Puerto de Tampico, ha tenido bien cordar el establecimiento de una Estación de Desinfección en C. Victoria y de un Lazareto en esta Capital, el que se recomienda que sea puesto bajo la dirección del Dr. Aristédes Mestre, quien en caso de que aceptase el nombramiento respectivo, observar las prevenciones aprobadas por el mismo Señor Gobernador y de las cuales remite una copia la Secretaría referida. Se acordó que se hiciera el gasto que, fuese necesario erogar en la construcción del citado lazareto así como en surtir este establecimiento de los medicamentos que necesitare para la curación de las enfermas, en caso de que las llegase haber”

  Invita la Exposición Universal de París 1900 a Monterrey, para que participe con alguna obra de cantería. Se enviaron un león de cantera, y algunos mascarones como los que adornan el palacio de gobierno que estaba en construcción. 

  “…29 de Agosto de 1898. Presidencia del Dr. Pedro C. Martinez… la Exposición Universal de Paris, invita esta H. Corporación, para que concurra, con alguna obra de cantería al inicado certámen como lo hizo en la Exposición de Chicago”

 

Moderniza el alcalde Martínez los servicios públicos

El ayuntamiento de Monterrey seguía modernizando los servicios públicos, aquí vemos la reparación de 116 luminarias y la conexión telefónica con el centro agrícola de San Bernabé:

  “…5 de Septiembre de 1898. Presidencia del Doctor Pedro C. Martinez… fueron aprobados los gastos de $ 109.38 centavos que se han mandado emplear en la recomposición de 116 faroles del alumbrado público y $ 64.66¢ con que el Municipio contribuye para la construcción de la línea telefónica establecida entre esta Ciudad y la Congregacion de San Bernabé”

 

Llega a Monterrey la modernización de la industria

En la administración de Pedro C. Martínez llegó a Monterrey una empresa que ‘bañaba’ con metales ciertas piezas. El proceso consistía en cubrir con metales de mayor resistencia a ciertas piezas de materiales económicos como el hierro y cobre. Esta empresa también torneaba la madera, desplazando mano de obra artesanal, pues artículos que se torneaban a mano ahora se elaboraban en un tiempo de fabricación de segundos:

  “… 5 de Septiembre de 1898. Presidencia del Doctor Pedro C. Martinez… Comunica que al Señor Samuel R. Browming le fué concedida exención de contribuciones durante siete años, por el capital de $ 15,000,00 centavos que se propone emplear en el establecimiento de unos aparatos electricos para niquelar, platear y dorar y broncear toda clase de rejas de metal y en un taller de maquinaria para cortar y tornear objetos artísticos de madera”

 

Se aplica el alcalde Martínez en el embellecimiento 

de las plazas Colegio Civil y De la Llave:

 

“…12 de Septiembre de 1898. Presídencia del Doctor Pedro C. Martinez… En la Plaza del Colegio Civil se colocaron ocho jarrones de fierro con sus correspondientes basamentos de cantera que han venido servir de nuevo adorno ese paseo.= En la Plaza de La Llave se principiaron trabajos de importancia que, al terminarse, harán de esa Alameda otro sítio mas de recreo para esta población”

 

Informa el alcalde Martínez avances en las obras de las plazas 

De la Llave y Degollado

En esta acta se ve cómo se informa el empedrado de la Alameda de la Llave y la construcción de la fuente de la Plaza Degollado, donde luego se colocaría una escultura de Neptuno y dos leones de metal forjado (hoy alberga el monumento a Morelos)

  “…10 de Octubre de 1898. Presidencia del Dr. Pedro C. Martínez... En la Alameda de la Llave se terminó  igualmente la pavimentación de ladrillo en sus cuatro costados; y en la plaza de Bolívar se construyó una fuente de piedra de cantera que ha venido substituir la que existía anteriormente y que se encontraba en muy malas condiciones”

 

Amplía B. Reyes la concesión a la Cía. De Luz eléctrica y Fuerza Motriz de Monterrey

En esta acta vemos la ratificación de la concesión de producción y distribución de energía a la compañía de Luz Eléctrica y Fuerza Motriz de Monterrey, alargando de 15 años a 25, las condiciones era mejorar el servicio y adaptarlo a los avances tecnológicos; igualmente se reducen los costos de la energía al público.

  “… 12 de Octubre de 1898. Presidencia del Dr. Pedro C. Martínez… Participa que solicitud del Sr. Lic. Crispiniano Madrigal, apoderado de la Compañía de Luz Eléctrica y Fuerza Motriz de Monterrey, el Ejecutivo del Estado había tenido bíen ampliar los términos de duración y exención de contribuciones, estipulados entre esta H. Corporación y la indicada Compañía, al firmarse el contrato relativo, de 12 de Diciembre de 1889, del modo siguiente: a 25 años de término de 15 que se fijó en la cláusula 1a. del Capítulo I del citado contrato, dejando subsistente el derecho de preferencia que en dicha cláusula se menciona y 15 años el plazo de 10 de exención de contribuciones Municipales y del Estado que determina la cláusula XIX del Contrato aludído; disponiéndose que la Compañía deber pagar por toda contribución Municipal y del Estado, al expirar el plazo de la exención, una cuota mensual que no exceder de $80:00¢ obligándose: 1o. A ampliar dentro del término de seis meses, contar desde hoy, su planta, y aumentar, en la proporción necesaria, sus líneas, invirtiendo en ello una cantidad de cincuenta mil pesos cuando menos.= 2o. A conservar la planta en las mejores condiciones de servicio, montándola según los actuales adelantos científicos é industriales del ramo, sin que ésto implique una modificación esencial del sistema de producción de la corriente eléctrica ni la de su instalación sino en cuanto sus intereses convenga. 3o. A rebajar diez y seis pesos la renta mensual de cada uno de los focos de arco voltaico de dos mil bujías, destinados ahora al servicio público y de los que en lo sucesivo se necesiten permanentemente para el propio objeto. 4o. A reducir $2.25¢, dos pesos veinticinco centavos la renta mensual de los focos de luz incandescente de diez y seis bujías, para los suscritores que tengan un solo foco y 5o. A conservar un exceso de fuerza bastante para alimentar cincuenta focos del arco voltaico de dos mil bujías, y mil focos de luz incandescente de diez y seis bujías, para cuando el Gobierno ó el Ayuntamiento necesiten alumbrado extraordinario, cargando por el servicio el precio que en cada caso se convenga.= Por causa de falta de la Empresa en el cumplimiento de cualquiera de las obligaciones ante dichas, quedar sin efecto la concesión en lo relativo las ampliaciones que por la presente se le otorgan”

 

Pavimenta con empedrado el alcalde Martínez, el camino a Villa de Santiago

No había aún carreteras en México, pero algunos caminos estaban bien apisonados y limpios de maleza, aquí vemos uno de los primeros caminos empedrados del norte de México, el de Monterrey a la Villa de Santiago, la administración de Martínez, empedró la parte correspondiente a Monterrey:

  “…5 de Diciembre de 1898. Presidencia del Dr. Pedro C. Martinez… La de Obras públicas informó que habían quedado terminados los muros que se estaban construyendo por la calle de Galeana en el punto en que toca al río, faltando solamente concluir el empedrado para que la mejora allí emprendida pueda ponerse al servicio público: que se había dado principio un trabajo igual por la calle de Puebla: que se continuaba recomponiendo el camino que de esta Capital conduce la Villa de Santiago”

 

Pese a las inconformidades populares por falta de democracia, el alcalde Pedro C. Martínez supo conseguir apoyos para que la Ciudad mejorara

Ya la falta de democracia era evidente en el país, sin embargo el proyecto de industrialización prosperaba; había nuevas fábricas y la ciudad se embellecía pero los bajos sueldos y la falta de derechos laborales ya eran patentes.

  Durante el año de 1898 la ciudad tuvo grandes logros Martínez era un hombre bien relacionado con el porfiriato y la ciudad lo aprovechaba con buenos presupuestos y grandes proyectos industriales.

 

FUENTE

https://elregio.com/Noticia/e48bac9b-3c32-4184-91d3-706c2956ae71

https://www.gaceta.unam.mx/de-manicomios-a-instituciones-de-salud-mental/

ACTAS DE CABILDO DE MONTERREY 

10 de enero de 1898

17 de enero de 1898

1º de febrero de 1898

7 de marzo de 1898

11 de abril de 1898

25 de abril de 1898

4 de Julio de 1898

27 de Julio de 1898

15 de agosto de 1898

29 de agosto de 1898

5 de septiembre de 1898

12 de septiembre de 1898

10 de Octubre de 1898

12 de octubre de 1898

5 de diciembre de 1898

 


 

 

 [1]